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Opinión 22 de junio de 2019

Al padre de la Patria en el mar

Por Oscar Filippi

Alguna vez, el gran pensador, José A. Ortega y Gasset escribió, “… La ingratitud es el defecto más grave del hombre. Fundo esa calificación superlativa, en que siendo la sustancia del hombre su historia, todo comportamiento antihistórico adquiere el carácter de suicidio.”

Así lo ratifica un gran escritor argentino, Don Marcos Aguinis, quién en su libro titulado, “El Combate Perpetuo”, (un verdadero homenaje literario a la figura del Almirante Guillermo Brown), en el prólogo escribió: “… Ignoraba cuan novelesca había sido la vida del Almirante Guillermo Brown (…) Integra la galería de personajes cuya riqueza de aventuras hubiera entusiasmado a los mejores cultores del género. Los documentos sobre sus vicisitudes no sólo proporcionan asombro, sino fantasía. Parece inverosímil cuánto le sucedió y cuánto hizo. Es un personaje que deslumbra y enternece desde el principio al fin.”

Marcos Aguinis, fiel a su costumbre, realizó una exhaustiva investigación de los archivos históricos nacionales para conocer en profundidad la historia de nuestro Gran Almirante. De ella poco existe en los libros escolares, el olvido, que es el mejor amigo de la ingratitud, había caído sobre su persona. “El combate Perpetuo”, fue editado por primera vez en 1982, pero sólo en 1995 cobró notoriedad pública. Hasta ese entonces, sólo en pequeños ámbitos académicos navales, la persona y el valioso aporte a nuestra historia, del Almirante Brown, era dimensionado y verdaderamente reconocido.

Legado Cívico

Afortunadamente, fue en ese ámbito, donde el vicealmirante (R) Jorge E. Duyos, en su investigación histórica, encontró y publicó como parte del manual de “Introducción a la Historia Marítima” una carta que el Almirante Guillermo Brown le escribiera al Brigadier General Juan Manuel de Rosas. Esa carta había quedado olvidada en la historia (encontrada en 1962), quizás, hasta haya querido ser ignorada en algún momento de nuestros tiempos. Lo cierto es que al leerla reconoceremos que el legado del Almirante Guillermo Brown a nuestras tradiciones navales, no sólo es militar, es también cívico.

Esta carta fue escrita por Brown, en uno de esos tantos momentos trágicos que signaron nuestra historia con guerras civiles y desencuentros entre hermanos… la reproducimos tal cual él la escribiera y dice así:
Buenos Aires 12 de Abril de 1829 – “Mi estimado amigo y Sr. General Dn. Juan Manuel de Rosas – Escribía a V. una carta amistosamente y con el mejor intention del mundo de mi parte aunque no he tenido el gusto de recivir contestación como Gefe General de la Escuadra Nacional creí que V. me hubiese correspondido y ahora le repito como amigo particular de V. y en general del país, teniendo el honor de proponerle un medio por el qual se corte desavenencias que no producen outra cosa que la destruction de los mejores intereses del país como está sucediendo, agregándose la disunión entre las familias digna de mejor suerte; esta es del modo siguiente:”

“Que queden los Exercitos a igual distancia de esta Capital, dexando al pueblo y campaña enteramente libres para elegir la Junta Legislativa, observando la más perfecta neutralidad que todo hombre libre se pronuncie con la mejor confianza de su voto, y luego que esta corporación este reunido obre y delibere sobre la felicidad general, sometiéndonos a sus providencias, y de este modo tendríamos la gloria de haber contribuido en parte evitando al mismo tiempo la efusión de sangre entre hermanos que solo deben abrasarse olvidar el pasado y rogar al poderoso para que jamás aparescan entre nosotros calamidades de la guerra civil y que viviendo unidos podramos lograr nuestra verdadera felicidad.”

“Los consules extranjeros puedan garantir este convenio si es del agrado de V. quienes estan interesado en la prosperidad del país. Yo espero que este proposición será bien recojido por todos y los verdaderamente amigos de la grandeza y prosperidad del país. Yo escribo esta como Dn. Guillermo Brown y no como Gobernador Delegado sin embargo la proposición será cumplido. Queda su más atento y obediente servidor. – Q.S.M.B. Firmado: W. Brown” (sic) del original.

Legado Militar

Aunque no aparezca en muchos libros de historia naval, Guillermo Brown fue uno de los Almirantes, en la historia mundial, que más veces se batió en combate en el mar. A diferencia de otros grandes almirantes de la historia, la grandeza de sus hazañas y victorias navales, proviene precisamente por la precariedad y poco número de naves que le tocó comandar.

Así la historia lo convirtió en el “crisol” donde se forjan los marinos argentinos. A su humildad, su inteligencia naval, determinación, espíritu de sacrificio, generosidad, valor y coraje, hoy lo homenajeamos también por su integridad cívica, reflejada en éste documento, muy pocas veces publicado.

La Armada Argentina navega con proa al futuro, al igual que ayer, lo hace con escasos medios, pero con la misma determinación de aquellos marinos de nuestra independencia, de aquellos marinos también, que ofrendaron su vida en Malvinas… con su legado y tradiciones, la Armada sabe hoy, que las coordenadas del futuro hacia el que navega, están escritas en nuestra heroica historia naval. Fueron escritas por el propio Almirante Guillermo Brown.

Hoy, iluminados por el Sol del mismo pabellón e inspirados en su tradición histórica, en sus valores éticos y morales, en la humildad de su persona y en su generosidad en la victoria, recordamos la figura de nuestro Gran Almirante, frente a esta misma costa que él visitara en 1826 a bordo de la goleta “Sarandi”, mostrándonos la importancia estratégica del “Cabo de las Dos Corrientes”, saludando desde la historia, a una Mar del Plata que aún no había nacido.

Para cerrar esta nota, nada mejor que la pequeña frase con la que Marcos Aguinis cerró el prólogo de su libro sobre el Almirante Guillermo Brown: “Por su mensaje desde el ayer para el hoy tan confundido.”