por Sebastián Jorgi

Con una estructura bipartita y a lo largo de XXI capítulos, Lino Marcos Budiño teje cuadros, anécdotas e historias de la vida real y del pasado sociopolítico argentino, entre siglos. Una novela equilibradamente escrita, con cortes filosóficos e inflexiones éticas que refieren a ese “pasado” de nuestra patria, controvertida, polémica, polarizada. El hombre, “debe evolucionar y lo hace lentamente, bajo la norma racional del acierto y el error…lo podrá lograr cuando amordace el Ego y libere la Conciencia dormida”, leemos en La siembra, el capítulo largada de A fuego lento.

Con habilidad compositiva, Budiño traza un arco desde el año 1964, cuando “los Beatles inundaban las radios AM de Buenos Aires, aunque el gran Elvis Presley seguía deleitando a los jóvenes, el tango vibraba en los teatros, cafetines y emisoras de la Capital Federal”.

La época la completa el autor con el accidente de Julio Sosa, las inolvidables noches de Caño 14, con el polaco Goyeneche y Horacio Ferrer.

Aparecen en la escena Felipe, un estudiante avanzado de Derecho, el cura Manuel Jesús Vásquez y Mirtha. Ésta se ha enamorado del cura, por lo que Budiño mixtura una historia de amor en la novela, insertando diálogos creíbles, a lo que suma caras reflexiones sobre el intrincado siglo XX argentino.

Y el arco engloba tiempos y geografías, Pico Truncado, Trevelin, Caleta Olivia, Comodoro, algún viaje a España, como por ejemplo Puerta de Hierro, donde reproduce un diálogo de Perón con un ocasional visitante. También alguna ironía desliza entre líneas el novelista. Y muy importantes serán las notas al pie de página, una bibliografía oblicua, que reflejan un testimonio de vida propia y al mismo tiempo, tramos histórico-políticos entre siglos. Dolorosos espacios, como el Golpe del 76 y sus consecuencias.

Una novela de compromiso, sin amagues, cada capítulo es un punch, un directo a la conciencia crítica de los argentinos, al menos, en la que nos va quedando, un cross a la memoria colectiva, escindida entre olvidos e inocencias. Lino Marcos Budiño es un académico e investigador de las Ciencias Sociales, Jurídicas y Pedagógicas. Ha dirigido establecimientos docentes en los niveles secundario, terciario y universitario. Rector Honorario de la Universidad Maimónides, es conferenciante y columnista en varios medios, radiales y gráficos.

A fuego lento, es una novela que connota una metáfora sobre nuestra historia, sumida en la incesante controversia y en el inmovilismo.