El Concejo aprobó tres proyectos inmobiliarios cuyas compensaciones urbanísticas tendrán como prioridad la puesta en valor del Distrito Tecnológico del Conocimiento y la Innovación, ubicado en la zona de la Estación Ferroautomotora.

En términos generales, las compensaciones urbanísticas son la rentabilidad que les queda a los desarrolladores a partir de las excepciones al Código de Ordenamiento Territorial (COT) para poder construir más metros cuadrados que lo permitido.

De acuerdo al expediente al que accedió La Capital, la intención del Ejecutivo es que los fondos que se obtengan por dicho concepto se utilicen para diversas intervenciones como el acceso a la Estación Ferroautomotora; cruces peatonales; distribuidor de tránsito de las calles Chile y 25 de Mayo; bicisenda sobre 9 de Julio; veredas y solados; e iluminación del predio.

En la sesión ordinaria de hoy, el Legislativo le dio luz verde a las siguientes iniciativas: la puesta en valor y refuncionalización de Villa Titito (Santiago del estero 1299) y del predio donde funcionaba el ex hotel Hurlingham (Boulevard Marítimo 4063), y la construcción del Distrito de Arte y Diseño (DAD), que estará delimitado por las avenidas Juan B. Justo y Edison y las calles Bermejo y Solís.

En el caso de Villa Titito, la ordenanza avanzó por mayoría, con el voto positivo de Juntos por el Cambio y Alejandro Carrancio. Unión por la Patria (UxP) se pronunció en contra y Acción Marplatense se abstuvo.

Por su parte, Nicolás Lauría (Creciendo Juntos) se abstuvo en particular en esta iniciativa, más precisamente en el artículo 5°, que reglamenta las compensaciones. El basquetbolista propuso, al igual que en los otros dos proyectos inmobiliarios que también fueron aprobados, que la rentabilidad que obtengan los desarrolladores se dirija al mejoramiento del complejo del barrio Centenario, donde hay un serio riesgo edilicio.

En la misma línea, UxP propuso en el caso del DAD y del exhotel Hurlingham algo más abarcativo: que las compensaciones se usen en obras de infraestructura, servicios públicos y/o hábitat en sectores carenciados.

Sobre esta cuestión, Marianela Romero (UCR) objetó que el Concejo “está dando al Ejecutivo la decisión de destinar ese dinero prioritariamente a un espacio que el mismo cuerpo definió que tenía que ser el Distrito Tecnológico, donde aún falta desarrollar espacio público y edificaciones que acompañen el desarrollo de la industria”.

El detalle de los proyectos inmobiliarios

A grandes rasgos, el proyecto en Villa Titito apunta a la reparación completa de todo el edificio original-declarado como bien patrimonial-, procurando respetar tanto la arquitectura original como su ambientación.

La iniciativa contempla también la construcción de dos torres de edificio de 12 pisos y uno extra con amenities, lindantes al inmueble patrimonial.

Por su parte, la propuesta para el exhotel Hurlingham fue aprobada en general por unanimidad, pero nuevamente se suscitaron diferencias por las compensaciones. La oposición presionó para que se modifique el destino de las mismas, con el voto de Lauría, UxP y Acción Marplatense; pero no prosperó por el sufragio doble de Marina Sánchez Herrero, la presidenta del HCD. Lo mismo ocurrió con el DAD.

El proyecto general  propone la construcción de un edificio destinado a vivienda multifamiliar que estará conectado con un hotel boutique; la generación en el predio de un importante espacio abierto al aire libre, a modo de patio, remanso y paréntesis espacial; y, en forma independiente, se planea la instalación de locales comerciales gastronómicos.

Por último, el DAD se edificará en el polígono territorial delimitado por las avenidas Juan B. Justo-Edison y las calles Bermejo – Solis. De esta manera, se planea un remate para el gran espacio abierto del Golf Club Mar del Plata y la Base Naval.

Con una inversión que superará los 100 millones de dólares, el Concejo autorizó la construcción en las tierras donde se levantaba el estadio Súper Domo. La propuesta tiene un basamento comercial con seis edificios, entre los que se destacan dos torres de 30 pisos que serían vinculadas entre sí por un puente con un “rooftop” en el décimo piso.

Se contempla la instalación de viviendas, condominios, oficinas, locales, gastronomía y entretenimiento. Todo ello con un parque en altura común a los edificios de 6.000 metros cuadrados, con piletas con vistas panorámicas al Golf, el Náutico y Yatch Club, el mar y la ciudad.

Chateau Frontenac

En tanto, en el plenario se consensuó el regreso a comisión del expediente que autoriza la puesta en valor y refuncionalización del Chateau Frontenac (Alvear 2010).

Aquí la propuesta busca la creación de un “paseo cultural” a cielo abierto frente al complejo residencial Chateau Frontenac. Además, se otorgan indicadores urbanísticos para el desarrollo de viviendas multifamiliares.
Sin embargo, por pedido del oficialismo, se acordó el regreso del expediente a comisión debido a que en la redacción del proyecto no quedaba claro hasta cuántos pisos podría construir el desarrollador.