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Opinión 27 de febrero de 2018

Arroyo mintiendo entre la basura y el vuelo corto

por Gerardo Gómez Muñoz

La parrala de la basura entró ahora en una de sus vueltas mas tristes. Posiblemente se represente mejor con metáforas del Dante: los círculos infernales de la Divina Comedia. Arroyo, Leitao y el “mejor equipo de los últimos 20 años” no hacen otra cosa que asegurar el infierno. Después de unos pocos años en los que el tratamiento de los residuos dio resuello, el sentimiento frustrante de volver a tropezar con la misma piedra retornó a los primeras planas la cantilena de “la emergencia”.

El Banco Mundial y el BID invirtieron en la ciudad más de 30 millones de dólares. El 75% de un total que tenía contraparte de 25% en el municipio durante la gestión de Gustavo Pulti.

Se compró un campo de 63 hectáreas al mes de haber asumido la gestión de Pulti y luego comenzó la búsqueda ante los órganos financieros internacionales y la Secretaría de Ambiente de la Nación de los recurso que permitieran un tratamiento sensato de los residuos. Se planificó un centro de disposición final con tratamiento de líquidos lixiviados que una vez tratados con procedimientos de aireación natural convertían los contaminantes en líquidos para riego. También se previeron celdas aisladas con materiales sintéticos que preservaran las napas de agua subterránea y un sistema de captación de gases para el aprovechamiento energético.

Según los técnicos de ambos bancos que visitaron en su momento la ciudad (y lo publicaron en sus respectivas páginas web) la vida útil del predio sería de 20 años. El 14 de mayo de 2012 se inauguró la obra en un acontecimiento que tuvo trascendencia nacional y Mar del Plata fue la primera ciudad del país que, con 700.000 habitantes, inició el anhelado camino de la separación domiciliaria. Con grandes esfuerzos de comunicación se llegó al resultado de un 65% de vecinos separando la basura entre orgánica y reutilizable en cada casa.

La bolsa verde y la bolsa negra recolectada en días separados empezó a construir parte del paisaje urbano ecológico de la cuidad.

La empresa Tecsan ganó la licitación y todo hacía pensar que las 12 emergencias anteriores, que atravesaron cuatro gobiernos municipales, habían quedado en el pasado. Nadie sabe ahora (o muchos se preguntan) cómo fue que ocurrió, pero la única verdad es la realidad decía -“un viejo general paraguayo”- y Mar del Plata perdió las inversiones del Banco Mundial, del BID y el 25% que aportaron los contribuyentes de la ciudad.

El predio sin gestión desde diciembre de 2015 consumió su vida útil y Arroyo puede felicitarse de haber logrado el récord de destrozar en dos años lo que tenía que durar 20. Ya nada detiene a los lixiviados de la basura urbana que vuelven a contaminar las napas, los gases orgánicos se acumulan con el riesgo de volver a tener una explosión como aquella recordada del baño de Waterland sobre el ex predio de Venturino y, lo mas triste e irritante, Mar del Plata no separa residuos porque su gobierno los amontona.

“Arroyo destruye con impunidad” dijo Marcelo Fernández, “la comicidad del plan secreto que anunció en su campaña empieza a volverse algo trágica”, agregó. Y sin más anunció la denuncia penal que ingresará en los próximos días en la que el intendente y Leitao serán mencionados como los responsables del daño ambiental y económico que sufre la cuidad.

Esta es la triste historia de un estupidez. Pero también es una crónica del eterno retorno a los mismo problemas a los que condena la incapacidad y la falta de horizontes de los gobernantes de vuelo corto, como la perdiz, como las perdices que huyen azoradas de los campos contaminados y conflictivos en los que antes la naturaleza tenía otras oportunidades de recrearse.

“La Peña de Maxi”

Así, a falta de una denominación más formal, fue titulada la reunión de radicales congregados, la noche del viernes en el amplio quincho de la casa de Tres de Febrero, pasando Champagnat en que habita Tato Serebrinsky, quien junto al concejal Martínez Bordaisco, fueron los organizadores. Ese dato exime de mayores precisiones, ambos representan claramente a la formación que va hilvanando el diputado Maxi Abad, quien no estuvo presente en gesto que tuvo una interpretación clara: como se trata de una formación absolutamente radical y la interna de Cambiemos puede ser muy “a destiempo”, como dice el colega Ramiro Melucci, y “conflictiva” como cabe agregar desde esta página.

Con más precisiones se debe recordar que Abad, “el fresco”, según las calificaciones de allegados, es el presidente del bloque de diputados de la alianza multipartidaria y, además muy cercano al entorno político de la gobernadora María Eugenia Vidal, jefa indudable, de la política oficialista. Esta apunta muy claramente, sin palabras, pero según los hechos, a instalar como futuro candidato a intendente al diputado nacional Guillermo Montenegro. Le resultará harto complicado mantener su signo ascendente si tan de entrada se lo vincula con los radicales que ya están plantados en contra de la infracción y del mismo Carlos Arroyo que con su pedantería vacua, como de costumbre, buscó ubicación mediática -“yo no acepto ningún virrey”- que le evite el sofocón de la grave crisis de la basura que su gestión instaló en Mar del Plata.

Al cabo del asado que puso en aprietos al anfitrión que dispuso de una dotación de 50 cubiertos y, aparecieron, 60 comensales, eso sí, las carnes, achuras y refrescos alcanzaron para todos, hubo algunas filtraciones. Todos salieron sabiendo -en rigor ya habían entrado así- que el camino será el que trace “Mariú”, por supuesto, con el debido respeto y consideración a la entidad cuantitativa y cualitativa del radicalismo marplatense. No fue mero detalle la cantidad de “franjamoradistas” presentes entre aún cursantes universitarios y la mayoría ya jóvenes egresados. También se advirtió que se apunta a radicales históricos que, sin desmedro de otros no identificados, se vio a Julio D’Augerot y Roberto Castiarena.

Quizás para evitar roces internos, el sábado por la mañana se vio en extensa charla cafeteril, a quien sí aparece como muy resuelta a defender y explícitamente los fueros y la prioridad de los votos de la UCR vernácula, Vilma Baragiola, qué duda cabe, y a Tato Serebrinsky, activo referente de Abad.

El senador que va ubicándose

El senador integrado a través de su origen peronista “Creer” a la interna partidaria gubernamental, Lucas Fiorini, sin ruidos ni atropelladas mediáticas, sigue ubicándose en el meollo político. Al margen de su participación en actividades vecinalistas, en cercanías de las inquietudes pesqueras y portuarias, en actividades deportivas como el boxeo al que está vinculado como mecenas aficionado, se lo ve ubicándose en sugestivas escenas políticas. En los últimos días anduvo de visita y en tren de colaboración en el Al Ver Verás, Almagro- Florida” y en el Imperial Box.

No descuidó estar presente y a la vista en actos que abundaron con la presencia de la gobernadora y sobre todo lució muy cercano en tomas gráficas con Montenegro. Algunos de sus colaboradores no vacilaron a título de pálpito que si se afianza la posibilidad de que sea ungido desde el gobierno provincial, como precandidato a intendente el mencionado diputado nacional, con seguridad Fiorini estará allí con su respaldo y el de su gente. A propósito, el concejal de “Creer”, Alejandro Carrancio, también se hace ver en el Concejo. Preside nada menos que la comisión de Hacienda, en estos días nada calmos, en la cresta de la ola y tratando de acercar posiciones para seguir avanzando.

Vilma se sabe protegida

La concejal Baragiola si bien se ha plantado en los derechos que como la radical mejor ubicada, su impresionante elección del año pasado y que es la mejor considerada en las encuestas, tiene la constancia de la defensa de sus correligionarios del orden nacional. El diario La Nación, comentando la reunión, hace unos días, de la conducción radical con el presidente Macri refiere que la cuestión de la futuras candidaturas fue una de las principales preocupaciones manifestadas por el primer mandatario.

La cuestión es evitar conflictos porque donde haya que competir con rivales de riesgos hay que unirse y lograr candidatos propios y que en el PRO existe la convicción de competir pero donde haya candidatos impuestos de “Cambiemos” que no haya confrontaciones internas. Al respecto, el diario escribe que hubo radicales presentes que señalaron que, en el caso Mar del Plata, donde Vilma Baragiola aparece claramente como candidata puesta, no se procure inventar alguna candidatura extraña. Y mencionaron expresamente a Guillermo Montenegro. Por eso ha bajado los decibeles que algunos pronosticaban que irían en aumento.