Uno de los jóvenes que había sido acusado por el ataque contra el cuidacoches en las afueras del Hospital Materno Infantil fue liberado después de que la propia víctima explicara cómo se produjeron los hechos. En tanto, el hermano del otro sospechoso fue detenido días atrás.

Según pudo averiguar LA CAPITAL, la salud de Gabriel Franco (25) mejoró la semana pasada y eso hizo que los médicos del Hospital Interzonal General de Agudos (HIGA) le otorgaran el alta. Al abandonar el nosocomio, se presentó entonces a declarar ante el fiscal Fernando Castro y dio detalles de la agresión a puñaladas que sufrió el domingo 2 de febrero pasado.

Luego de conocer su versión y reunir otras pruebas en la causa, el investigador consideró que Ezequiel Bardot, uno de los detenidos que había señalado en su indagatoria no tener ninguna vinculación con el ataque, podía ser excarcelado y así lo autorizó la Justicia de Garantías.

Bardot, al que apodan “Eze”, y Rodrigo Couñago, reconocido como “Hormiga”, habían sido aprehendidos durante un allanamiento en una vivienda de la zona de Arturo Alió (ex 180) y Rodríguez Peña. Ese procedimiento fue llevado a cabo el martes 4 de febrero a la tarde, por el personal de la comisaría segunda que quedó a cargo de la pesquisa.

Los investigadores sospechaban que ambos hombres habían atacado a Franco, apodado “El Peca”, luego de que mantuvieran con él una violenta confrontación verbal durante la tarde del domingo anterior. El hecho ocurrió en la esquina de Alvarado y Santiago del Estero, donde el “trapito” solía cuidar vehículos estacionados.

Sin embargo, cuando estuvo en condiciones de declarar, la propia vícima dio su versión ante el fiscal Castro e incriminó al hermano de Couñago. El último fin de semana, éste fue detenido y se negó a ser indagado, por lo que fue trasladado a la Alcaidía Penitenciaria N° 44 de Batán, donde se encuentrsa su familiar.

En tanto, Bardot quedó en libertad y la Justicia deberá definir su situación procesal durante los próximos días.
Vale destacar que fuentes allegadas a la investigación del caso manifestaron que, al igual que el primero de los Couñago detenidos, Franco también tiene antecedentes penales e incluso pesaba sobre él una reestricción de acercamiento a uno de los comercios de la zona del Materno, debido a que tiempo atrás había protagonizado un enfrentamiento con el dueño. Incluso, agregaron los informantes, el cuidacoches se había peleado con los taxistas que frecuentan la parada del mismo cruce de calles.