Yael Palavecino, la maestra que ayer se encadenó a la Municipalidad en señal de protesta por el quite de las bonificaciones docentes, todavía mantiene en su cuello, cubriendo su torso, el cartel con el que denuncia que quienes están frente a un aula cobran hoy en el municipio $34 pesos la hora mensual, mientras que el intendente Carlos Arroyo cobra “hasta cuando duerme” $467, y los secretarios $242.

También, como ayer, muestra a todo el que pregunte – o no- sus recibos de sueldo. Los saca de la cartera, los levanta para que todos los vean, los reparte y desparrama en la mesa de la sala de comisiones en donde hoy, a un día de la jornada de protesta de los docentes municipales, se reúne la comisión de Educación del Concejo Deliberante.

Junto a la dirigente del Sindicato de Trabajadores Municipales (STM), Alejandra Ayek, fueron las últimas invitadas a hacer uso de la palabra en una reunión en la que el arroyismo brilló por su ausencia (el único en excusarse con anticipación por tener otros compromisos fue el concejal Ariel Ciano), pero no así los problemas de la comunidad educativa local.

La docente Palavecino junto a la dirigente del STM, Alejandra Ayek, llegando a la comisión de Educación del Concejo Deliberante.

“Gracias por la invitación y el espacio. Soy Yael Palavecino, maestra de la escuela municipal N°14. Hace siete años que soy docente municipal, cargo que concursé. Realmente tomé esta determinación (el de encadenarse) porque ya no daba para más, realmente quebré económicamente. Lo dije cien veces ayer y lo vuelvo a decir”, dijo la maestra, en el inicio de su intervención.

“Creo que este Ejecutivo no nos dio el espacio que nosotros necesitábamos para poder desarrollar nuestra tarea y tener nuestro salario completo. Desde el año pasado, con los problemas que generó la quita de la bonificación, lo convirtió en una garantía salarial, lo que nos perjudicó totalmente. También congeló nuestro sueldos y juega con el dinero de la Provincia, porque cuando quiere somos municipales y cuando no quiere somos docentes provinciales”, señaló.

Si bien Palavecino señaló que “cualquier colega de cualquier estamento está pasando problemas económicos importantes”, hizo especial hincapié en la situación que atraviesan los docentes municipales, que desde iniciado el conflicto, “la garantía salarial absorbió todos los aumentos que se fueron dando”, explicó la maestra.

Concejales de la comisión de Educación escuchan el testimonio de Yael Palavecino.

Sobre su caso puntual, explicó que fue una de los 180 docentes que, el mes pasado, se habían visto beneficiados por una cautelar que les permitió cobrar, de manera retroactiva, las bonificaciones que durante cuatro meses no se les había brindado. “Cobré $24.000, es decir, $6.000 por bonificación”, señaló.

Sin embargo, y luego que el Ejecutivo presentara un recurso de queja, la Cámara de Apelaciones terminó no dando lugar a la cautelar, haciendo que el beneficio vuelva a caer. “El problema -señaló Palavecino- es que este mes me descontaron el 50% de eso que había cobrado del poco sueldo que me queda. En total me sacaron $12.000. Es muchísimo dinero porque yo no soy una persona que tiene un sueldo sideral”.

Palavecino también volvió a ratificar la idea de que los docentes no sólo trabajan en las cuatro horas que pueden llegar a estar frente al aula.”Corregimos, planificamos, buscamos material, nos capacitamos. Y todo eso lo hacemos fuera de las cuatro horas, salvo que sea alguna capacitación en servicio”, señaló.

Sin poder contener el llanto, la docente aseguró que el trato que el Municipio tiene con los docentes es “denigrante” y aseguró sentirse “desesperada”.

“Cuando ayer me llamaron pensé que iban a tener la amabilidad de hacerme pasar a una oficina. De decirme, al menos, a ver compañera, agente municipal, docente municipal, quédese tranquila, vamos a darle una respuesta. Pero lo mínimo que hicieron fue reírse en nuestra cara“, apuntó, en referencia a la reunión que mantuvo, junto a Ayek y otros dirigentes gremiales, junto a los secretarios de Hacienda y Gobierno, Hernán Mourelle y Alejandro Vicente.

Yael Palavecino aseguró haberse sentido maltrata en la reunión que mantuvo con funcionarios.

“Yo tengo los recibos acá de lo que cobro, no pueden denegar que me descontaron más del 20% de mis sueldos. Y no sólo me pasó a mí: lo mismo le ocurrió a los 180 docentes que cobraron el mes pasado por la cautelar. Una cautelar que ganamos”, señaló la docente.

Ante una sala de comisión repleta y en silencio, escuchando el duro testimonio de la docente, Yael volvió a quebrarse al señalar su vocación.

“Todo el mundo sabe lo que trabajo y que he trabajado en muchas escuelas de la ciudad. Nosotros trabajamos por nuestro sueldo, pero me descontaron un 50%. Es mucho, no se puede así. Yo cobro $17.000, ¿cómo voy a hacer ahora? no puedo pagar nada”, dijo, y aseguró que no puede ni dejarlo “para comer, porque no alcanza”.

“Ya está, en algún momento saldré adelante junto a mí familia, pero quiero que quede asentado que la angustia va a seguir”, cerró.