Luego de haber recuperado la posesión de los silos, el Ministerio de Agroindustria de la Nación tiene previsto transferirle ese espacio de casi cuatro hectáreas a la Provincia de Buenos Aires para que finalmente pase a manos del consorcio de administración del puerto de Mar del Plata, anunció ayer el secretario de Agricultura, Ganadería y Pesca, Ricardo Negri.
De este modo las autoridades portuarias podrán volver a darle impulso a un proyecto para ampliar el espigón 3 y generar más metros de amarre y una nueva área para la carga y descarga de contenedores.
Al mismo tiempo la medida facilitará que la empresa Obras Sanitarias retome la construcción del desagüe del Arroyo del Barco, paralizada a causa de los inconvenientes legales que existían para acceder al predio. Según pudo saber LA CAPITAL, una vez despejado el panorama, esa obra podría ser reanudada a finales del mes de julio.
Los silos volvieron a quedar en manos de la Nación esta semana, cuando funcionarios de Agroindustria ingresaron concretaron el desalojo a la empresa Elevadores Mar del Plata S.A. “Hay un deterioro generalizado con daños en instalaciones y edificaciones en un estado de fragilidad alarmante”, señaló el presidente del consorcio del puerto, Martín Merlini, tras recorrer el lugar. Todo parece indicar que por su estado, la infraestructura existente tendrá como destino su demolición.
Al ingresar al predio, los funcionarios pudieron constatar la existencia de áreas con riesgo de derrumbe y un avanzado estado de deterioro en casi todas sus instalaciones.
Para poder recuperar el predio la Nación resolvió meses atrás rescindir el contrato con Elevadores Mar del Plata S.A, argumentando que la empresa había incumplido con diversas condiciones del contrato, provocando que tanto los silos, como el elevador de granos y las demás instalaciones sufrieran un intenso proceso de deterioro.
“El objetivo es transferir el predio a la provincia para que el puerto de Mar del Plata pueda desarrollarse y alcance todo su potencial operativo”, afirmó Negri.
“Desde hace varios años el concesionario usufructuaba el espacio de manera irregular como playa de estacionamiento de camiones, rubro para el cual no tiene habilitación”, explicó el Ministerio de Agroindustria en un comunicado precisando que consecuencia, “el lugar volvió a quedar en manos del Estado Nacional”.