Por Marcelo Solari

Luego de las dos semanas de ensueño junto al español Marcel Granollers en el US Open, que por muy poco no pudieron coronarse con el título (perdieron la final), el marplatense Horacio Zeballos ya descansa junto a su familia en su hogar, en Buenos Aires. Rodeado de sus afectos, disfruta de unos días de descanso y, de paso, recarga pilas para el tramo final de la temporada 2019 con un objetivo bien claro: poder clasificarse para el Masters de dobles.

Tras el subcampeonato en Flushing Meadows, el zurdo del Edison Lawn Tenis apareció en el nuevo ranking de la ATP en un histórico tercer puesto, un sitio nunca alcanzado por un doblista argentino varón.

Por ese lugar poco menos que increíble en el escalafón internacional y por la magnitud de sus éxitos (dos títulos Masters 1000, en Indian Wells, con el croata Nikola Mektic, y en Montreal, con Granollers), a los 34 años, Zeballos vive el mejor año de su carrera.

Ya planificó y confirmó el cierre del año, que afrontará en binomio con el tenista ibérico, con quien se complementa de maravillas dentro y fuera de la cancha.

Zeballos y Granollers volverán a la acción el 30 de este mes, en el ATP 500 de Beijing (China); luego jugarán en el Masters 1000 de Shanghai (China), a partir del 6 de octubre; desde el 21 de octubre participarán en el ATP 500 de Basilea (Suiza); y por último, a partir del 28 de octubre, en el Masters 1000 de París.

Horacio Zeballos y su mejor ubicación en el ránking ATP.

La carrera de dobles hacia el Masters de fin de año (reservado para los ocho mejores duetos de la temporada) es encabezada por los número uno del mundo, los colombianos Juan Sebastián Cabal y Robet Farah, con 7940 puntos, y una amplia ventaja sobre sus escoltas, el polaco Lukasz Kubot y el brasileño Marcelo Melo (3445). Octavos, en ese listado, aparecen el estadounidense Rajeev Ram y el británico Joe Salisbury (2570); y décimos, muy cerca, Zeballos y Granollers, con 2200 puntos.

Con un rasgo distintivo por sobre el resto. Ese puntaje lo sumaron en apenas dos torneos: el título en Montreal (1000) y la final perdida en Flushing Meadows (1200). Todavía le faltan tres títulos para alcanzar la línea de Guillermo Vilas (16). Pero si sigue así, Zeballos va camino a convertirse en el mejor doblista argentino de la historia. Si es que ya no lo es.