Diego Ramos vuelve a hacer temporada en Mar del Plata: “Para mí, el teatro es todo”
Entre recuerdos de su infancia en la ciudad y su pasión por las tablas, el artista se prepara para volver con "Sex, la obra", desde el 6 de enero en el Teatro América.
“Sex, la obra” tuvo su estreno nacional en Semana Santa en Mar del Plata. Tras las funciones de ese fin de semana largo, inició una gira por todo el país, se instaló en Buenos Aires y, luego, fue confirmada por Carlos Rottemberg como una de las propuestas del verano 2026 para su sala América.
La reversión de José María Muscari junto a Paola Luttini y Matías Napp de la experiencia Sex -que también tuvo varias incursiones en la ciudad-, cuenta con Diego Ramos, quién es parte del elenco del universo Sex ininterrumpidamente desde el estreno de la primera performance.
“Soy original, estoy en el mundo Sex desde el primer estreno”, compartió el querido actor y conductor actualmente al frente de “La noche es nuestra” por la TV Pública y su programa radial “Ramos Generales”, en una charla con LA CAPITAL.
Junto a Ramos trabajan en esta propuesta dos actrices que formaron parte de ese universo en distintos momentos, como Gloria Carrá y Julieta Ortega. Además, de un artista que se incorporó a la experiencia con esta nueva versión: Nicolás Riera -su primera función, fue, justamente, la del estreno en Mar del Plata-.
Ramos destacó el espíritu de la obra: “Tiene la esencia de Sex, obviamente. Pero también es diferente. Este no es un show musical, sino un show teatral. Está más basado en textos y en situaciones, que en coreografías, canciones y demás”.
En cuanto a que conserva la esencia del planteo original, el actor definió que “pretende divertir, pretende desafiar, pretende cuestionar, que pienses, que te aventures, que subrayes que está bien lo que te gusta, que está bien lo que no te gusta. Y, por supuesto, con el respeto y el consenso de que estamos divirtiéndonos hablando de sexo. No dejamos a nadie afuera y cada uno participa de la manera que quiere”.
Es que, como en la experiencia, la obra rompe la cuarta pared “porque es la esencia”. Pero el actor asegura que “nadie se siente vulnerado ni vulnerable desde la platea. No nos metemos de mala manera, ni nada por el estilo, ni mucho menos toqueteando, todo fluye de una manera inocente y muy cómplice”.
Para Ramos, la importancia de esta propuesta es poner sobre el escenario “diferentes tipos de sexualidades, diferentes tipos de sexos, de seducciones, de formas, de gustos… más eróticos, más burdas, más guasas, más soeces, más sutiles, más poéticas, más románticas o más pornográficas. Tratamos de no dejar nada afuera”.
Es que, a modo de resumen, definió: “hay tantas sexualidades como personas existimos y tratamos de plasmarlas acá”.
Seguir explorando el universo Sex es para Ramos una manera de continuar arraigado a un mundo que ocupa un lugar fundamental en su vida. “Yo conduzco en la tele, conduzco en la radio, pero sigo haciendo teatro porque, para mí, el teatro es todo. Yo hice seis años -casi siete ya- esta obra y antes había hecho otra y otra y otra y otra. El fin de semana pasado no tuve teatro y no entendía nada. Para mí el teatro es una cita que tengo que tener sí o sí con la gente que compró la entrada, que viene a ver el show y trabajo constantemente en eso, en estar bien durante el día, para estar bien la noche”.
Y si se trata de combinar ese amor, con hacerlo cada noche en Mar del Plata, tiene un incentivo extra. “Es una ciudad que yo amo, que conozco mucho. Vine muchísimos años de mi vida. Los tres meses de vacaciones muy ’80. Y feliz de la vida. Es la ciudad donde yo quiero pasar el resto de mi vida dentro de unos años, poner una escuela, quizás, aprovechar que acá hay mucho arte local, mucho teatro local”.
Y para finalizar contó una anécdota: “En la Plaza Mitre mi papá me enseñó a andar en bicicleta y me acuerdo perfecto por la callecita que fui. Tengo todos los recuerdos de mi infancia y de mi adolescencia acá, en Mar del Plata”.