En momentos en que los casos de coronavirus experimentan un crecimiento en Mar del Plata, las centrales obreras lanzaron fuertes cuestionamientos a la forma en que el municipio encara la pandemia.

A través de un comunicado conjunto, los secretarios generales de la CGT regional, Miguel Guglielmotti; la CTA Autónoma, Diego Lencinas, y la CTA de los Trabajadores, Graciela Ramundo, manifestaron su preocupación por “la inacción por parte del municipio y su secretaria de Salud”.

“Día tras día vemos un aumento exponencial de contagios y la falta de respuesta ante la necesidad de realizar hisopados masivos. La circulación comunitaria estaba entre nosotros, mientras el intendente avanzaba con las
aperturas indiscriminadas. Somos conscientes del esfuerzo que desde la Provincia y la Nación llevan adelante para ampliar la atención frente al Covid-19, pero no lo vemos reflejado desde la municipalidad”, lanzaron.

“No han destinado una sola cama de internación frente a la pandemia. Empresas pesqueras donaron el valor de 10 mil testeos, que llamativamente fueron volcados a un solo laboratorio privado teniendo en nuestra ciudad al INE para llevar a cabo esa labor”, lamentaron.

Los dirigentes gremiales mencionaron además que los testeos “no se volcaron en su momento para lograr una detección en distintos barrios donde la circulación del virus en forma comunitaria chocaba con las declaraciones de funcionarios municipales negando la realidad”.

Puntualizaron que el municipio “se sigue negando” a la implementación del Ved-Covid, “un software original desarrollado por un grupo del INE en conjunto con un desarrollador de la Facultad de Ingeniería de la Universidad Nacional de Mar del Plata que funciona exitosamente en más de 14 municipios para el seguimiento de contactos”.

“También son preocupantes y repudiables las actitudes de la municipalidad, que en medio de la crisis sanitaria intentó sin éxito (producto del rechazo colectivo de Cicop con el acompañamiento de las tres centrales obreras) reducir horas de atención pediátrica en los CAPS (Centros de Atención Primaria de Salud)”, criticaron.

Agregaron que además la comuna cerró “deliberadamente” dos de los tres paradores que daban asistencia y contención a personas en situación de calle. “Tanto el que funcionaba en el hotel de Chapadmalal como así también el que funcionaba en el barrio Las Américas fueron cerrados, dejando sin ninguna protección en el peor momento sanitario a quienes allí se albergaban”, afirmaron.

Ante este diagnóstico “poco alentador”, las centrales sindicales consideraron “necesario y urgente” que el
municipio “revea el abordaje integral que se desarrolla para contener a la pandemia”.

“Se debe dar un giro de 180 grados al modo y métodos de intervención que se lleva adelante. Exigimos que verifique que aquellas actividades que están funcionando sean las estrictamente autorizadas”, pidieron.

Además, dijeron haber tomado conocimiento de “empresas que obligan a trabajar presencialmente a su personal en casos en que debieran hacerlo en forma remota”.

“Es necesario que las autoridades municipales se ocupen y preocupen del control y cumplimiento de los protocolos en defensa de la salud de trabajadores y trabajadoras de actividades autorizadas. Reiteramos nuestra voluntad y compromiso para enfrentar la crisis, pero eso implica cuidar la salud de nuestra población y los puestos de trabajo. Esperemos que no sea demasiado tarde”, finalizaron.