La A.Pre.Vi.De difundió a última hora del jueves durísimas sanciones contra Atlético Mar del Plata y Once Unidos a raíz de los incidentes acaecidos en el epílogo de la final del Torneo Apertura de primera división de la Liga Marplatense de Fútbol.

La agencia provincial castigó al primero de los clubes con la disposición de jugar a puertas cerradas sus próximos diez partidos en condición de local, sólo en la divisional superior, y tampoco podrá llevar público en sus próximos diez partidos en carácter de visitante; en tanto que al segundo se lo penalizó con seis cotejos a puertas cerradas como local y seis con prohibición de asistencia para sus hinchas en calidad de huéspedes. En el caso de las restricciones a ambos clubes cuando oficien como visitantes, no afectarán al local de turno.

La sanción puntualiza que puede extenderse a partidos de otras categorías y a otras competencias y se justifica en la “insuficiciencia y liviandad que a criterio de esta Agencia ha adoptado el Tribunal de Disciplina de la Liga Marplatense de Fútbol en las sanciones dispuestas considerando la dimensión de los hechos”.

“No debe desconocerse -dice el comunicado de la agencia provincial- que el lamentable suceso por parte de los jugadores y cuerpo técnico que participaron en los incidentes fue presenciado por innumerable cantidad de menores, categorías inferiores y familiares que se encontraban en las tribunas del Estadio Minella, resultando un lamentable ejemplo para los mismos…”

La desmesurada sanción, por ejemplo, es mucho más dura que la sufrida en un primer momento por Peñarol y Quilmes -luego se redujo a la mitad- por los serios incidentes provocados por sus hinchas en el clásico amistoso de octubre del año anterior en el Polideportivo Municipal. Aquella vez se los penó a cada uno de los clubes con tres partidos como local a puertas cerradas y la prohibición de llevar público por otros tres en condición de visitante.

En cambio, en este encuentro no hubo problema alguno con los hinchas -las dos parcialidades presenciaron el partido una junto a otra en la platea descubierta solo separadas por un “pulmón- y a los futbolistas, los verdaderos responsables del escándalo, la justicia deportiva les aplicó sanciones según un reglamento.

No son frecuentes los casos en los que los organismos de seguridad se superponen con la justicia deportiva para aplicar sanciones. Por caso, el entonces Coprosede aplicó sanciones a Aldosivi al mismo tiempo que el Tribunal de Disciplina del Consejo Federal de fútbol por los incidentes en la recordada eliminación con Douglas Haig de Pergamino en el Torneo Federal A 2003/2004.