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Gastronomía 30 de octubre de 2017

El cine y el arte de la cocina

''Una pastelería en Tokio'' es una de las películas que participa de El Cine Cocina. Foto: Télam.

El Cine Cocina, 4ta edición del Festival de Cine Culinario, comienza hoy en la Alianza Francesa de la ciudad de Buenos Aires con producciones relacionadas con la gastronomía, tanto desde la ficción como del documental, además de talleres y presentaciones en paralelo.

La muestra, que comienza hoy con la proyección de “Theatre of Life“, de Pater Svatek, acerca del emprendimiento del chef Massimo Bottura, se extenderá hasta el 4 de noviembre, tendrá como sede la sala de la entidad en Córdoba 946, con entrada gratuita (pero que se puede reservar online) y sigue la impronta de “¿Cuál es el futuro de los alimentos?“.

Bottura, tres estrellas Michelin, ha organizado un comedor en el que se saca partido de la comida considerada desperdicio, y a su vez invita a otros chefs famosos para preparar platos sociales.

Al mismo tiempo se inaugurará la muestra de fotografía culinaria “No se juega con la comida“, del artista Nicolas Knepper y al termino de la proyección, según cuenta Ode Vergos, se servirá una muestra de lo que puede resultar de esa “comida desperdicio” después de pasar por la mano de los chefs.

Ode Vergos, organizadora de eventos culturales relacionados con la cocina, habló con Télam acerca de la idea de este festival y de varios de los aspectos que hace de esta edición diferente de las tres exitosas anteriores.

– ¿Cómo surgió la idea de organizar este festival?

– Soy productora cultural y organizo eventos que asocian lo gastronómico con el arte. Lo estuvimos haciendo con varios tipos de expresiones, por ejemplo la pintura con cenas temáticas, y en el caso del cine este festival de cine culinario. Paralelamente organizo otros eventos con asociación de gastronomía francesa, y la promoción de esa tipo de cocina, todos vinculados con la cocina y como me gusta el arte y me gusta puntualmente el cine, nació este evento hace 4 años.

– ¿Cómo se arma un combo de este tipo?

– Vamos buscando material a lo largo del año tratando de proponer siempre películas nuevas. Como es el noviembre vamos viendo todo lo que aparece durante el año y siempre nuestra intención incluir una película clásica que marcó de pronto nuestra misma cultura cinematográfica. El primer año proyectamos “La fiesta de Babette”, y este año quisimos darle hincapié a la cultura mexicana y por eso incluimos “Como agua para el chocolate”, de Alfonso Arau, invitando a María Barrera Sosa para que presente la película.

– ¿Con qué material se va a encontrar el público?

– Este año tenemos el honor de presentar dos películas muy recientes. La primera es “El viñedo que nos une”, una ficción, del talentoso Cedric Kaplisch, qué trata sobre el tan querido vino francés y aborda la transmisión de padres a hijos de ese patrimonio familiar y cómo se sigue con eso. La otra es “Las diosas de la cocina”, qué trata sobre mujeres chef cuya directora, Véranne Frédiani, fue recorriendo muchos países, incluso Argentina.

– ¿Hay más oferta de cine gastronómico en la actualidad que en otros tiempos?

– Es un tema que en el cine está creciendo. No es que haya una explosión pero sí más oferta y también un interés muy grande de parte del público y esto es lo que incentiva los realizadores de hacer más películas de este tipo. Se ha convertido en un tema que apasiona al público.

– Hay actividades paralelas relacionadas con el cine y la gastronomía…

– Nosotros proyectamos las películas pero también hacemos actividades relacionadas porque cuando vas a ver una película de tema culinario y ves durante hora y media platos de cocina, eso te genera ganas de comer. Es importante para nosotros asociar siempre eso variando un poco las ofertas.

– ¿Cuál sería un ejemplo claro?

– Por ejemplo para la película “Buscando a Gastón”, de Patricia Pérez, acerca de Gastón Acurio, vamos a hacer una presentación de productos peruanos, para “El viñedo que nos une” vamos a tener una degustación previa de vinos producidos por franceses en Mendoza para dar tono a la proyección,

– ¿Hay otras actividades más?

– Y también vamos a hacer talleres de cocina y al final de la semana vamos a tener una performance “Ver para comer, comer para creer”, con el artista plástico Nicola Costantino, qué va a presentar su propia película, “La artefacta”, pero también va hacer postres delante del público para degustar después de la proyección.

– El tema de la cocina incorporado al cine hay festivales como el de San Sebastián y otros que tienen secciones dedicadas a este tipo de películas…

– En San Sebastián tienen una linda selección a la que nosotros préstamos atención, y vamos siguiendo lo que se ve en otros festivales. Hay una movida que está interesando y que creció desde cuando nosotros empezamos en 2015.

– Este año se incorporan temas nuevos como el del desperdicio de comida que podrían generar polémica, más allá de ser temas del presente.

– En el festival se habla de comida, de cocina y de los problemas del hambre en el mundo, es decir es bastante amplio.

– ¿Cómo se encara el tema?

– Hay mucha actualidad con el tema del desperdicio de la comida. En Francia y en Italia fue votada una ley qué lucha contra el desperdicio, donde había tanta comida que se echaba a la basura ya que la gente no compra productos cuatro días antes de su vencimiento. Lo que ocurría era que esos productos eran arrojados a la basura y sobre ellos se derramaba lavandina para que no sean consumidos. Se creó un círculo virtuoso de asociaciones que van a buscar esa comida que no se consuma para darle a la gente que se puede consumir antes de su vencimiento.

– Son temas delicados en lugares con crisis alimentaria, más allá de sus variantes…

– Es obvio que los problemas de Europa y América latina son totalmente distintos. Allí hubo una ola de concientización acerca de ese problema. En Argentina es otro enfoque, otra problemática. no es exactamente un problema que proviene solamente de los supermercados es más amplio en todo lo que es la cadena de los productores y los mercados abastecedores. Aquí se está trabajando en un programa que se llama “Valoremos los alimentos”, promovido por el gobierno nacional para ordenar mejorar esta situación. En la programación incluimos la película “Theatre of Life”. Es una temática que nos interesa Y por eso la incluimos en la apertura el festival.

– El arte culinario, el de la alta cocina, es generalmente asociado a bolsillos abultados…

– Cuando se habla de cine a propósito de arte culinario no necesariamente se tiene que hablar de alta cocina. La comida puede ser lúdica, pedagógica, fresca, puede relacionarse con lo intelectual y de hecho la exposición fotográfica apunta a esa última definición y relación con los postres franceses conocidos. El festival tiene la particularidad de tener muchos ejes de miradas que le dan una riqueza importante, rico en comidas y en propuestas.

En la semana que comienza hoy también se verán. “Festines imaginarios”, de Anne Georget; “La revolución de los chefs”, de Olivier Mille; “Todo sobre el asado”, de Gastón Duprat y Mariano Cohn; “Cocking Up a Tribute”, de Andrea Gómez y Luis González, y “Una pastelería en Tokio”, de Naomi Kawase.