En la última sesión del año, el interbloque de Juntos por el Cambio intentará entregarle al intendente Guillermo Montenegro las principales herramientas para gobernar el año próximo: el presupuesto 2023 y las ordenanzas fiscal e impositiva, que contienen un aumento del 73% en las tasas.

El cuerpo también abordará el cálculo de gastos y recursos de Obras Sanitarias (OSSE) y su tarifario, que establece un incremento del 80% con una cláusula gatillo por si la inflación se dispara por encima de ese porcentaje.

En los papeles, la jornada legislativa se dividirá en dos: para las 10 está convocada la asamblea de concejales y mayores contribuyentes que buscará ratificar las ordenanzas fiscal e impositiva, aprobadas en primera instancia por el Concejo el 15 de diciembre. Luego será el turno de la sesión de prórroga que, entre otros ítems (como el proyecto para agilizar las habilitaciones) considerará los presupuestos.

Salvo el cálculo de gastos y recursos de OSSE (que por la abstención de la oposición llega con aval unánime), el resto de los expedientes logró en las comisiones dictamen de mayoría, con el voto clave del bloque de Acción Marplatense y la negativa del Frente de Todos y Crear.

El presupuesto de la administración central del municipio y los entes descentralizados (Emtur, Emder, Emsur y Emvial) asciende a $ 77.170 millones, el doble del cálculo del año pasado. El gobierno local destacó que cerca de $ 10 mil millones serán destinados a obras y puntualizó que el objetivo es priorizar la prestación de servicios a los vecinos.

El secretario de Hacienda, Germán Blanco, estimó que el aumento de tasas estará por debajo de la inflación de 2023. El gobierno nacional la proyecta en 60%, pero las consultoras privadas la ubican cerca del 100%. De todos modos, el bloque del Frente de Todos cuestiona que no se establezca un escalonamiento: la suba del 73% se cobrará desde la primera boleta del año.

Las ordenanzas fiscal e impositiva amplían beneficios para nuevos emprendimientos. Simplifican el régimen de monotasa (eliminarán una declaración jurada) y las habilitaciones serán gratuitas.

La factura promedio de OSSE, que hoy es de $ 1995,48 bimestral, treparía con el aumento a $ 3591,87, una diferencia de $ 1596,39, a razón de $ 798 por mes.

Los insumos que utiliza la empresa municipal de agua, cloaca y pluviales aumentaron 88%, según explicó el oficialismo. También hubo un fuerte incremento de gastos destinados a la energía: de los $ 613 millones previstos el año pasado a $ 1231 millones para 2023.

El Frente de Todos también marcó sus discrepancias con este aumento: advirtió que con la cláusula gatillo podría dispararse más allá del 100%.

El cálculo de recursos de OSSE alcanza los $ 10.895 millones, de los cuales el 93% es de origen municipal y el 6,7% restante es de origen nacional afectado.

El paquete presupuestario fue tratado este mes con un rápido paso de los secretarios y los presidentes de entes por la Comisión de Hacienda, donde expusieron las principales líneas de gestión y respondieron inquietudes de los concejales.

De acuerdo al titular de Hacienda, la idea es que “el Estado municipal siga convirtiéndose en algo más simple y moderno, manteniendo el extremo cuidado de los recursos que administra, con la intención de que esto contribuya a una mayor previsibilidad y facilitando la generación de empleos por parte del sector privado”.