Efectivos de la DDI local aprehendieron a un hombre de 45 años que quería cobrar por tercera vez la misma deuda. Para ello había extorsionado y amenazado a la víctima.
“El Cubano”, un hombre de 45 años y contextura robusta, pretendió cobrar una deuda que ya había sido cancelada no una, sino dos veces. La víctima de la extorsión no soportó más el sometimiento y pidió ayuda a la policía.
Es que el “apriete” alcanzó un límite intolerante: según fuentes de la investigación “El Cubano” amenazó de muerte a toda la familia del deudor, que en realidad ya no lo era porque había pagado.
Los datos filiatorios de la víctima y de “El Cubano”, quien por estas horas está detenido y acusado del delito de extorsiones reiteradas fueron mantenidos en reserva.
Lo que sí pudo saberse es que ambos se conocían desde hacía ya un largo tiempo y que esa relación fue sobre la que levantó un trato informal. “El Cubano” le prestó cerca de 5 mil pesos al otro hombre y puso condiciones de cobro.
Los detalles de la devolución no se conocen pero está claro que la víctima pagó lo adeudado -acaso con alguna demora- y creyó que con eso quedaba saldado el acuerdo.
Sin embargo esto no fue así para “El Cubano”, quien detectó rasgos de vulnerabilidad en la psicología del otro y lo sometió.
La víctima se sorprendió cuando llegó el pedido de pago cuando ya lo había hecho, pero la situación se tornó tan violenta que decidió pagar 4 mil pesos más. Volvió a creer que el tema estaba cerrado; y volvió a equivocarse.
“El Cubano” insistió en un nuevo cobro pero se encontró con una férrea negativa como respuesta y activó, entonces, una fase más violante aún de su extorsión: le agregó amenazas para la víctima y su familia.
Esta situación no pudo ser soportada, naturalmente, por el hombre que decidió dar aviso a la policía. Personal de la DDI investigó el caso y con apoyo judicial optó por hacer que la víctima acordara un falso pago con “El Cubano”.
Esta tarde los efectivos policiales montaron una vigilancia en la zona de Buenos Aires y Bolivar donde se iba a realizar la supuesta transacción. Pero surgió un imprevisto: la víctima se atemorizó y desistió de seguir adelante.
Ante esta situación los policías, que solo contaban con una fotografía de “El Cubano”, hicieron una recorrida hasta que lo pudieron identificar y detener.
Extorsiones reiteradas fue el delito que le imputó el fiscal Fernando Berlingeri de Delitos Culposos y ordenó el traslado de “El Cubano” a la Alcaidía Penitenciaria de Batán.