El camping “El Durazno”, donde cinco jóvenes fueron detenidos por violar a una chica de 14 años durante los festejos de Año Nuevo, es un tradicional espacio de albergue turístico, sin duda el de mayor calidad y prestaciones que existe en la Miramar.

Está ubicado en el acceso a la ciudad, sobre el kilómetro 1 de la ruta provincial 11, frente a la zona de playas del norte de la ciudad. Cuenta con una trayectoria de años, siempre elegida por residentes y turistas a partir de su gran oferta de confort y divertimento. Posee sectores de cabañas, bungalows, fogones, carpas y piscina, además de otros servicios adicionales que tienen entre las preferencias de los turistas que apuntan a este tipo de pernocte.

Cuenta con servicio de seguridad privada y siempre ha sido destacado por los turistas, especialmente grupos familiares que deben adecuarse a un reglamento interno de convivencia para permanecer en ese sitio. Es más no sé recuerda algún hecho de violencia trascendente o similar al vivido por favor estas horas. “Un hecho tan grave es inédito en ese lugar”, le confió a LA CAPITAL un conocedor de la zona. Por estas horas en el camping todo es conmoción.

En cuanto a los precios, para acampar por día una persona tiene que pagar 350 pesos. “Incluye espacio para carpa, luz, fogones y piletas gratis”, se destaca en la páginas web de El Durazno.

En tanto, las cabañas para dos personas cuestan 1400 pesos por días; para cinco, 2100 pesos y para seis, 2450 pesos. Los “dormis” para cuatro personas cuestan 2600 pesos por días, mientras que los bungalows tienen un valor de 2900 pesos por día para cuatro personas. Los que quieran dormir en su motorhome o casilla rodante deberán pagar 250 pesos por día.

En la página web del lugar también se destacan una serie de normas administrativas que se deberán cumplir para ser aceptado. “Toda persona que desee hacer uso de las instalaciones en calidad de huésped, debe registrarse en la administración aportando los siguientes datos: Nombres y apellidos completos, nacionalidad, documento de identidad, edad, profesión y domicilio”.

Además, a cada uno de los ingresantes se les colocará una pulsera laminada para garantizar un control más preciso y certificar las máximas normas de seguridad de los que utilizan los servicios que brinda el Camping. Y explican: “El uso de la pulsera es obligatorio y de responsabilidad del ingresante. Quien la extravíe o no la presente cuando se la reclame por las autoridades o guardas del Camping, deberá abonar los costos de estadía aunque ya lo haya hecho. Esto garantiza una mayor tranquilidad tanto para los nuevos ingresantes como para quienes ya estén disfrutando de los servicios ofrecidos por el Camping El Durazno”.

Sector de carpas del camping El Durazno donde ocurrió el abuso.

En el apartado de responsabilidad, se aclara: “A su ingreso la delegación, familia y/o grupo debe designar una persona responsable ante la Administración, el cual será garante directo de los perjuicios de cualquier naturaleza que él, sus acompañantes o invitados causaren. No serán admitidos menores de edad que no vayan acompañados de una persona mayor de edad que se responsabilice por ellos”. Y en el apartado de “identificación” se afirma: ” En el caso de grupos y contingentes el responsable deberá llenar la lista con los nombres completos de los asistentes y el número de documento correspondiente.