CERRAR

La Capital - Logo

× El País El Mundo La Zona Cultura Tecnología Gastronomía Salud Interés General La Ciudad Deportes Arte y Espectáculos Policiales Cartelera Fotos de Familia Clasificados Fúnebres
La Ciudad 11 de noviembre de 2016

El emotivo festejo de los hermanos Weinbaum con sus ahijados oncológicos

Los ahijados oncológicos de los hermanos MDQ, Eugenio y Sebastián "Culini" Weinbaum, celebraron el lazo afectivo que los une disfrutando de un día de campo. El festejo estuvo signado por las risas, shows de magia, rica comida y premios para todos.

Los protagonistas de “MDQ para todos”, Eugenio y Sebastián “Culini” Weinbaum, invitaron a sus ahijados del área oncológica del Hospital Materno Infantil a disfrutar de una jornada a pleno sol para celebrar el vínculo que los une desde hace 16 años.

Más de 500 personas partieron en varios colectivos desde la Plaza Rocha, rumbo a la Estancia Santa Isabel, sede de la celebración del 16 aniversario del padrinazgo de los Weinbaum.

Ya en el campo, todos disfrutaron de la pileta, de un show de magia del Mago Black, de rica comida, de caminatas por la llanura, dónde pudieron conocer las parras que dan vida al conocido vino que allí producen, de los inflables establecidos en la pileta y hasta de un concurso de saltos ornamentales en la misma.

“Nos sentimos honrados de haber sido elegidos padrinos del área oncológica del Hospital Materno Infantil de Mar del Plata y además infinitamente emocionados al enterarnos que no fueron los directivos del hospital, sino los mismos chiquitos quienes nos eligieron. Es una responsabilidad muy grande para dos irresponsables”, dijo Eugenio generando risas entre todos los presentes.

Ya un poco más serio, aseguró que “hoy son una parte muy importante de nuestras vidas y corazones“, mientras “Culini” confesó que “siempre decimos que nadie tiene nada comprado. Se trata de pasarla bien día a día y esta es nuestra oportunidad para hacer un fiestón y agasajarlos como se lo merecen”.

Luego fue el turno de los sorteos y regalos, desde tablets hasta smartphones, cámaras deportivas extremas, y las infaltables bicicletas y tablas de skate.

Este año, varios de los ahijados -algunos que en su momento no tuvieron más esperanzas que la fe-, se acercaron a festejar con sus bebes recién nacidos, generando lágrimas de felicidad entre todos los presentes.

Los Weinbaum agradecieron el apoyo y colaboración de “mucha gente y empresas que con su solidaridad y compromiso, año tras año, nos ayudan a hacer de nuestro aniversario una gran fiesta”.