Tras el lanzamiento del Operativo de Sol a Sol, el gobernador Axel Kicillof reconoció ayer que hay “incertidumbre” por el futuro de la obra pública y señaló que aguarda “precisiones” del Gobierno nacional para continuar con las intervenciones pautadas en Mar del Plata.

“Lo cierto es que la provincia de Buenos Aires hoy vive en una incertidumbre total. No sabemos qué va a pasar. Estoy esperando precisiones para continuar con la obra pública en Mar del Plata”, sostuvo Kicillof en una conferencia de prensa que brindó en el NH Gran Hotel Provincial, luego de que el Presidente adelantara que habría recortes en el envío de fondos.

Entre las principales intervenciones en carpeta que están bajo la órbita bonaerense se destacan, por caso, la puesta en valor de la Rambla -la licitación por la primera etapa de los trabajos fracasó a fines de noviembre-; la circunvalación (que tiene un avance del 70% en la primera parte de los trabajos pautados); o el nuevo hospital de alta complejidad que se construirá en el predio del HIGA (Hospital Interzonal General de Agudos), donde los trabajos aún no comenzaron.

“Unos 23 gobernadores de la Argentina estuvimos reunidos con el Presidente días atrás, personalmente le pedí precisiones. No sólo sobre recursos en particular, sino también sobre cuáles son las pautas y estimaciones macroeconómicas para el 2024. Qué espera el Gobierno nacional con las decisiones que tomó: sus efectos en materia de producción, valor agregado, actividad, empleo y en los precios”, advirtió Kicillof.

Y continuó: “Esperábamos saber qué iba a pasar con la recaudación, con los fondos provinciales de diversa naturaleza. No sabemos qué sucederá con la coparticipación y con otros fondos específicos. No nos dieron ninguna pauta. El Gobierno nacional no sabe si va a haber 5 o 10 puntos de recesión o inflación. Por eso es difícil saber con cuántos recursos vamos a contar”.

En el caso específico de la obra pública, “la situación se agrava todavía más”, remarcó Kicillof. “Escuchamos que iba a haber una suspensión completa, pero no hemos tenido ninguna comunicación. Hay muchas obras que son importantes para Mar del Plata y que son compartidas -ya sea en la obra civil o en el equipamiento- con el Gobierno nacional, que suele contribuir a la inversión para generar equilibrios”, explicó el gobernador.

El mandatario bonaerense insistió en que la vocación de su administración “es continuar con las obras”, a pesar de que Nación adelantó que no habrá dinero. “Es paradójico: dicen que es un gasto, pero tiene un efecto multiplicador. Da empleo y genera consumo, ese es el círculo virtuoso que nos llevó a un desempleo de menos del 6%”.

En la misma línea, respecto a la recaudación de impuestos provinciales para paliar el recorte de recursos por parte de Nación, Kicillof reconoció que, por el momento, “no es fácil de cuantificar” porque no se sabe “cómo va a estar la economía en 2024, incluso para el mes que viene”.

“Es difícil saber con qué contamos. Todos los recursos serán usados para defender los derechos como la salud y la educación. Y deberemos priorizar en un marco de mucha incertidumbre. También crecerán las demandas y necesidades. En la medida de las posibilidades, intentaremos sostener cuestiones básicas”, adelantó el gobernador.

Por otro lado, ante una posible dolarización a futuro, el exministro de Economía se refirió a la posibilidad de que la provincia emita cuasimonedas.  “Hay una experiencia histórica con respecto a esto, que fue una crisis de liquidez cuando estalló la convertibilidad en 2001. Es un programa que tiene las mismas inspiraciones que la política económica actual. Esto no tiene nada de novedoso. Es un ajuste ortodoxo clásico. Argentina repite la misma historia de siempre. Es un ajuste fiscal, financiero, monetario y una devaluación muy fuerte. No se puede esperar algo distinto si se hace lo mismo”, alertó.

En 2001, señaló Kicillof, “se empezaron a emitir títulos de deudas, bonos de baja denominación, llamados cuasimonedas ante la crisis de liquidez”. Y precisó que la Provincia tiene como particularidad que cuenta con “la potestad, a través de la Legislatura, de emitir moneda”.

“Se ha hecho algunas veces. Nosotros estamos esperando a que los acontecimientos se desenvuelvan de una manera tal que no generen una crisis tan profunda de liquidez y de dinero circulante que obligue a pensar soluciones al respecto. No sabemos qué va a pasar”.

Por último, el gobernador cuestionó con dureza el DNU (decreto de necesidad y urgencia) que firmó Milei la semana pasada. “Le preguntamos al presidente qué leyes iba a presentar. No lo dijo, y al otro día firmó un decreto que ya conocía y no le había contado a los gobernadores. Anular 300 leyes con un decreto es algo que nunca pasó. No hay un constitucionalista en Argentina que diga que eso es constitucional”, criticó.

Según Kicillof, el paquete de medidas económicas del DNU parece partir desde una concepción en la que “las relaciones de mercado son de igualdad y de mutuo provecho”.

Sin embargo, manifestó que “cualquiera que estudió un poco de economía sabe que en la mayoría de los mercados hay muy poca igualdad”. Y que la “diferencia de fuerzas es muy grande”.

“Dejar que el mercado actúe solo tiene esta dificultad. Siempre ganan los mismos: los peces gordos van a terminar subyugando a los que son más pequeños. Esa es la realidad. Son relaciones de fuerza y de poder que se imponen y no permiten situaciones de igualdad”, sentenció.