LA PLATA (Corresponsalía).- El de 2021 será el primer Presupuesto provincial con perspectiva de género transversal.

“Con el objeto de fortalecer la institucionalización de las políticas de género, darles mayor visibilidad y generar herramientas de gestión que permitan avances concretos en la asignación, se inició un proceso de trabajo para llevar adelante un Presupuesto Provincial con Perspectiva de Género a lo largo de 2021”, menciona el proyecto que el gobernador Axel Kicillof envió en noviembre y que por estas horas se discute en la Legislatura bonaerense.

Pero, ¿Qué significa esto?, ¿A través de qué prácticas concretas se aplicará? Según se desprende del texto de la iniciativa, que se trataría el martes en ambas Cámaras parlamentarias, el Ministerio de las Mujeres, Políticas de Género y Diversidad Sexual que conduce Estela Díaz buscará -entre otras cuestiones- continuar con las instancias de formación y capacitación de las trabajadoras y trabajadores del Estado, en todos sus niveles, para que puedan formular y llevar adelante políticas que contemplen la perspectiva de género.

Además, se fortalecerá la presencia de las mujeres en diversos espacios de participación, fomentando el acceso a puestos de jerarquía y trabajando para la reducción de las brechas salariales con respecto a los hombres. También prevé rediseñar y fortalecer el Sistema Integrado Provincial de prevención y atención de las violencias por razones de género y mejorar el servicio de la Línea 144, la atención de los hogares y la asignación del Fondo de Emergencia y Acompañamiento.

Desde la Subsecretaría de Políticas de Género y Diversidad Sexual se buscará llevar a cabo acciones que permitan el acceso a los derechos humanos de las mujeres y del colectivo travesti/trans. En tanto que desde el Ministerio de Hacienda y Finanzas se construirá un Sistema de Indicadores de Género que recopile, clasifique, sistematice y publique información estadística sobre la situación de las mujeres en la provincia de Buenos Aires.

Desigualdades

En el texto de la iniciativa, el Ejecutivo citó la Encuesta sobre Uso del Tiempo y Trabajo no Remunerado (INDEC, 2013), que establece que “mientras que casi el 90% de las mujeres bonaerenses realiza tareas domésticas y de cuidado no remuneradas y les dedican en promedio aproximadamente 7 horas diarias, menos del 60% de los varones participa de estas labores y les dedican 3,6 horas diarias en promedio, esto es, la mitad del tiempo”.

También, según la Encuesta Permanente de Hogares para el primer trimestre de 2020, “en los aglomerados relevados para la provincia de Buenos Aires, mientras que la tasa de participación de los varones en el mercado laboral asciende a 68,2%, para las mujeres es de 48,6%, lo que refleja una brecha de 20 p.p. entre géneros”.

Asimismo, el proyecto sostiene que “la inserción laboral femenina se encuentra mayormente concentrada en ramas de actividad que se caracterizan por condiciones laborales más precarias. Una de cada cinco trabajadoras bonaerenses se emplea en el Servicio doméstico, donde la tasa de informalidad laboral asciende a 73,6%”.

Finalmente, destaca que “estos indicadores de desigualdad se profundizan en el marco de la crisis económica y sanitaria. La pandemia del COVID-19 expuso y profundizó las desigualdades estructurales dejando al descubierto como nunca el reparto desigual de las tareas de cuidado dentro del hogar, su imprescindibilidad y la falta de retribución por ellas”.