Por Emiliano Giri (*)

Algunos creemos que en la vida las cosas no suceden por casualidad. Que detrás de cada paso existe una causalidad, un hilo conductor —a veces imperceptible— que nos trasciende generacionalmente. Por eso elijo creer que el nombre que tu familia le puso al negocio, en algún punto, conecta con lo que hoy estás viviendo.

Hace casi 12 años me llamaste por teléfono, gracias a los oficios de Jorgito, para contarme que eras licenciado en Ciencias Políticas, que dabas clases y que nunca habías hecho política partidaria, pero que querías ponerte a disposición en aquella campaña que impulsamos en 2013. Éramos muy pocos, nuevos en política, llenos de ideales, bastante novatos… pero con unas ganas inmensas de cambiar la ciudad.

Y fuiste vos el que eligió ese eslogan que todavía nos acompaña: “Mar del Plata tiene más futuro que pasado”.

A partir de ahí construimos un equipo de amigos. De esos que no se arman por cálculo, sino desde el afecto y el corazón. Algo que hoy escasea, y por eso mismo vale tanto.

Vivimos de todo. La euforia de la campaña de 2015 con Arroyo, donde tu capacidad se vio en cada decisión: qué comunicar, qué propuesta impulsar, cuándo hablar y cuándo hacer silencio. Y la verdad es que hicimos historia en Mar del Plata. Vos nunca reclamaste derechos de autor; siempre te mantuviste con ese perfil bajo que te define.

Después vino el 2019. Desde otro rol, fuiste elegido por Guillermo para ser candidato a concejal, y desde ese lugar aportaste profesionalismo, honestidad y capacidad para construir los consensos que le dieron al intendente las herramientas para gobernar la ciudad. Te lo reconocieron en 2023 con el primer lugar de la lista, un lugar cargado de simbolismo institucional. Pero incluso así nunca te dejaste encandilar. Seguiste siendo el mismo: austero, dialoguista, trabajador.

Hoy cerrás un ciclo como concejal para abrir otro como intendente. Una oportunidad que llega por la generosidad de Guillermo, sí, pero también porque sos vos quien se ganó, con trabajo y coherencia, que ese sueño de pibe se vuelva realidad. Ese sueño que muchos tuvimos, pero que pocos logran concretar.

Me hace profundamente feliz ver que Mar del Plata, una vez más, tiene más futuro que pasado. Y que seas vos quien lo empiece a escribir.

Te quiero mucho, Agus. Nadie se lo merece más que vos. Te deseo suerte, templanza y claridad para lo que viene.
Somos muchos los que vamos a estar ahí, acompañándote como siempre: desde el corazón y con la misma convicción de hace 12 años.

(*) Presidente PRO MdP-Batán.