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La Zona 31 de mayo de 2019

En Balcarce se creó una escuela para formarse como bombero voluntario

Los brigadistas son aceptados a partir de los 8 años. Se trata de un cuerpo de reserva que comenzará a funcionar cuando tengan 18 años.

BALCARCE (Corresponsal).- “Creo que estamos formando una mejor calidad de ciudadanos”, aseguró el presidente de la Sociedad de Bomberos Voluntarios, Héctor Galella, para referirse a la apertura de una escuela de bomberos que está a cargo del oficial Walter Iborra.

Se trata de la brigada que está compuesta por una veintena de niños y adolescentes desde los 8 años en adelante que al llegar a cumplir los 18 años se transformarán en bomberos.

La institución balcarceña es pionera en materia de capacitación, cuenta con un centro de entrenamiento que es utilizado a nivel provincial y a su vez el bombero local, Fernando Alessio, es el jefe operativo de capacitación de la Federación de Bomberos de la provincia de Buenos Aires.

“Ya estamos pensando a futuro porque comenzamos con la escuela de bomberos. Ya tenemos una gran cantidad de chicos a partir de los 8 años que se comenzaron a formar. Es importante para la comunidad tener la tranquilidad saber que tiene guardianes de sus cosas y sus vidas”, contó Galella.

El dirigente comentó que “vamos dejando una huella sobre la solidaridad y de esa manera, contar con un pensamiento más amplio que el egoísmo. Es un reaseguro saber que contamos con reemplazos y con gente que conoce la institución”.

Asimismo, el titular de la entidad contó que “hay chicos que no vienen de familias de bomberos. Creo que todos cuando fuimos chicos quisimos ser bomberos y todavía hoy existe esa premisa. Para nosotros es una oportunidad para avanzar en que sean bomberos de verdad”.

El bombero explicó que “arrancamos desde un examen psicofísico, pasando por el certificado de residencia para conocer que no tiene antecedentes y luego una parte de instrucción de casi dos años para decir que el aspirante a bombero está en condiciones de hacer su primera emergencia”.

Y la actividad continúa con un proceso de experiencia. “Después tiene que contar con por lo menos cinco años de actividad para reconocerle que tiene X cantidad de salidas”, apuntó.

En tanto, advirtió que “no es fácil acostumbrarse a ver ciertas cosas en un incendio o un accidente. Tenés que irte preparando mentalmente y se va logrando con el tiempo. Ver la primera persona herida, ver sangre y hasta nos ha tocado ver cuerpos calcinados. Con el correr de la experiencia uno va adquiriendo ciertos mecanismos mentales para que todo lo malo que se ve en una salida no nos afecte”.