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Policiales 30 de septiembre de 2019

“Era mi único hijo y me lo arrebató”

La madre de Nahuel Barragán, el joven de 25 años que murió tras ser atropellado y arrastrado debajo de un auto por más de diez cuadras, estuvo presente en la primera jornada del juicio contra Yonathan Maurette y pidió justicia y la "máxima pena posible".

La familia de Nahuel Barragán.

La madre de Nahuel Barragán, Susana Sahuette lleva puesta una remera con una foto de la cara de su hijo, el joven de 25 años que falleció el 3 de diciembre de 2017  tras ser atropellado por Yonathan Maurette y arrastrado debajo del auto por más de diez cuadras. Este lunes, momentos antes de ingresar a la sala del Tribunal Oral en lo Criminal N° 1 la mujer dijo: “Las disculpas ya no sirven, no lo perdono en la vida”.

Para Sahuette, este lunes fue una jornada particularmente difícil ya que, en el inicio del juicio, tuvo que ver por primera vez al militar que atropelló y mató a su hijo: “Fue terrible, realmente terrible. Es muy difícil revivir todo lo que le pasó a Nahuel, todo lo que me pasó y tuve que sufrir”.

“Para mí fue homicidio simple, creo que lo mató a propósito, las pericias van a decir eso”, consideró la madre de Barragán y agregó: “Yo quisiera la máxima pena posible. Era mi único hijo y me lo arrebató“.

Susana recuerda a su hijo a diario y lo describe como alguien “tranquilo, muy bueno, trabajador, salía con sus amigos a pescar y a jugar al pool. Era muy sano”.

En estos casi dos años desde que Barragán murió, Sahuette aseguró que “nunca” recibió un pedido de disculpas de Maurette o su familia por lo que pasó. Ni una palabra, nada. “Las disculpas ya no sirven, no lo perdono en la vida“, expresó.

Susana, como otros familiares y amigos de Nahuel Barragán, llevan la cara del joven en una remera que en la espalda tiene como leyenda “no puedo olvidarte, no voy a olvidarte, te lo dije al oído y es una promesa”. Esa promesa se trasladó al pedido de justicia en el inicio al debate oral contra Yonathan Maurette.