Por Marcelo Solari

Parte del plantel de Peñarol visitó este viernes el Hospital Interzonal Especializado Materno Infantil, en una recorrida por la posta vacunatoria de ese nosocomio, en donde se aplica dosis contra el coronavirus a menores de entre 3 y 17 años.

Previo al ingreso, coordinados por Valentín Belza, los jugadores Lucas Gorosterrazú, Federico Marín, Phillip Lockett, Carlos Buemo, Tomás Monacchi y Bruno Sansimoni recibieron indicaciones de los médicos y luego compartieron algunos minutos con los pequeños que esperaban su turno para recibir la vacuna junto a sus padres.

Antes de iniciar la recorrida, el base olavarriense le dedicó un aparte a LA CAPITAL para hablar sobre la actividad de la víspera y, por supuesto, de la Liga que se aproxima.

-¿Habías tenido una experiencia anterior en visitas a hospitales? ¿Qué significa una acción como ésta?
-Había participado en algunas visitas de este tipo, pero nunca en algo relacionado con la vacunación y menos con niños. Nos los propusieron y aceptamos sin dudar. Es una buena iniciativa.

-Ustedes como deportistas ya tienen incorporada la importancia de la vacuna, para protegerse a ustedes mismos y también a los demás.
-Tal cual. La vacuna no solo sirve para protegerse a uno mismo, sino también para proteger a los demás. Creo que de a poco se va entendiendo eso. Esperamos que los que todavía no decidieron vacunarse puedan darse cuenta de lo importante que es. Este tipo de acciones me parece que son útiles y ayudan a generar conciencia. Es importante escuchar a los médicos, que están en la primera línea desde el primer momento y saben bien todo lo que significa el virus y cómo combatirlo.

-¿Cómo los afectó a ustedes, los deportistas, y a vos en particular, la pandemia de coronavirus?
-Nuestro trabajo es jugar al básquet profesionalmente. La llegada de la pandemia literalmente nos cortó al medio una temporada. Y cuando pudimos volver, lo hicimos con un montón de restricciones, de cosas nuevas, distintas, a las que hubo que adaptarse. De a poco se va normalizando y eso es muy bueno. Por eso también es importante que todos sepamos de qué se trata y cómo cuidarnos.

-¿Hay ansiedad por volver a jugar como locales y con público en la cancha?
-Sí, sí. Ya pudimos jugar en Buenos Aires con algo de gente en las tribunas, pero acá en Mar del Plata, con la mayoría de nuestros hinchas, es otra cosa. Así que estamos esperando que llegue la semana que viene para encontrarnos con todos ellos.

-¿Cuáles son las expectativas para la Liga, teniendo en cuenta que les faltó poquito para clasificar al Final 8 del Súper 20?
-Estamos bien. Hace dos semanas que estamos entrenando, preparándonos para la Liga. Si bien no era nuestro objetivo meternos en el Final 8, después de la primera burbuja nos dimos cuenta de que teníamos chances reales y no se dio. Viendo ahora la etapa de definición, nos da un poquito de bronca no haber podido estar ahí.

-Ese partido con Ferro…
-Sí, el partido con Ferro todavía lo lamentamos. Contra Platense también lo cerramos mal. Estamos tranquilos, tratando de aprender de todo eso y con los pies sobre la tierra, también, conscientes de lo que somos y de lo que podemos llegar a ser. Estamos trabajando duro para poder hacer una buena Liga.

-¿Qué fue lo mejor y qué lo peor en el Súper 20?
-Hubo muchas cosas. Creo que lo mejor fue la predisposición y la entrega del equipo. Por momentos mostramos el juego que queremos y para el cual entrenamos. Y lo peor, también tiene que ver un poco con eso, ya que en algunas ocasiones no pudimos hacer eso que habíamos entrenado. En defensa a veces nos faltó ritmo y un poco de energía. Es algo que se puede esperar en un comienzo de temporada. Y que se puede ir solucionando con los entrenamientos. Son cuestiones para corregir y estamos trabajando en eso.