BALCARCE (Corresponsal)

Cuando uno visita el CEAT se encuentra con un aura de amor que lo rodea que es la mejor terapia para un recién nacido que debe superar ciertas patologías cognitivas o de conocimiento. El clima de bienestar y alegría del Centro de Estimulación Temprana para el Desarrollo Infantil es un arco iris en medio de la atención hospitalaria del Fossati.

Es que en un ambiente lleno de colores y juegos un grupo de profesionales estimula a los niños de 0 a 3 años para que puedan tener una buena base de desarrollo que sea el cimiento para una buena calidad de vida.

LA CAPITAL se sumó a los festejos de sus primeros 30 años de vida con una visita para conocer este servicio que se parece más a una segunda familia que a un centro de recuperación.

La directora, Teresa Lloret, fue la encargada de destacar que se presta una atención personalizada e individual a más de 50 chicos que se van alternando entre altas y derivaciones y nuevas llegadas.

“Atendemos a niños que presentan una situación de discapacidad o un riesgo de desarrollo en sus primeros años de vida. Pretendemos brindar herramientas y propuestas pedagógicas para ir subsanando falencias con una atención integral de todo un equipo”, contó.

La unidad está conformada por un director, terapista ocupacional, asistente educacional, asistente social, fonoaudiólogo y maestras de atención temprana. Atienden en la planta baja del Hospital “Felipe A. Fossati” y otras sedes pero a su vez brindan un “plus” porque se involucran con la familia. Así es como visitan el hogar del niño que deben asistir, se interiorizan de otras situaciones que puedan existir y a su vez les brindan una capacitación personalizada para que el estímulo no termine nunca.

“Los modos de intervención se brindan en sedes como el hospital, centros comunitarios y sociedades de fomento. También existen chicos que no pueden salir de sus casas y por eso lo visitamos y le damos la atención integral con herramientas como el juego y asesoramos a la mamá para que continúe con el abordaje”, resaltó Lloret.

La profesional mencionó que a los chicos que concurren a cualquier sede se les organiza al menos tres encuentros en sus hogares. “Tenemos que saber el contexto donde el niño se desarrolla. Por eso, en sus casas les organizamos espacios de juegos, cuál es el mejor momento para jugar o qué hacer a la hora de bañarse”, contó Lloret.

Y como si fuera poco brindan capacitaciones sobre promoción y prevención en salud de recién nacidos basándose en la comunicación, socialización y el arte, con análisis de las prácticas pedagógicas.