Alumnos del Instituto Superior de Formación Docente Almafuerte se manifestaron ayer frente a la Secretaría de Educación de la Municipalidad formulando duros cuestionamientos contra la responsable del área, Ana María Crovetto.
Los estudiantes acusaron a la funcionaria no haber adoptado ninguna decisión para responder al reclamo para que sean desdoblados algunos cursos a los que, según dijeron, asisten hasta 50 personas que permanecen “apiñadas” dentro de aulas que carecen del mobiliario necesario.
Según explicaron, este problema fue denunciado reiteradamente y hasta ahora no habían tenido respuestas, por eso decidieron movilizarse hasta la Secretaría ubicada en Catamarca 2930 y aguardar la llegada de Crovetto que recién se produjo pasadas las 11, cuando recibió a dos delegadas a quienes prometió visitar hoy la sede del Instituto ubicado en Necochea 3672.
Los estudiantes exigieron que la Secretaría asigne fondos para ampliar las aulas y para adquirir nuevos bancos y pupitres ya que muchos de ellos toman clases sentados en el piso.”Dedicaron la plata a hacer designaciones políticas y no a resolver nuestro problema”, denunciaron.
Entre los pedidos está el de 20 mesas y 40 sillas, desdoblamiento del segundo año y cuarto año, revisión de los calefactores e ingreso del instituto al plan de estímulos económicos.
Durante la protesta que motivó el corte parcial de la calle Catamarca, los alumnos tomaron conocimiento de que Crovetto no se encontraba en el lugar, lo que acrecentó su enojo. “No es ninguna novedad que no esté. Según nos cuentan, tiene por costumbre llegar al mediodía y trabajar apenas dos o tres hora por día”, le dijo una manifestante a LA CAPITAL.
Tras algunos minutos de espera finalmente Crovetto se hizo presente en la dependencia y aceptó recibir a un reducido grupo de estudiantes en su oficina.
“Nosotros somos docentes en formación, los futuros maestros de las niñas y niños de este país. Estamos convencidos que la educación es la herramienta para cualquier cambio, una convicción que usted más que nadie comprenderá y compartirá”, fue parte de la carta que le entregaron a Crovetto. Por esta razón, agregaron, “esperamos una respuesta positiva a la demanda de una formación digna y de calidad”.
Según explicaron a LA CAPITAL los manifestantes, “a partir de la asunción de la nueva gestión, el Instituto se encuentra en un estado de abandono, no sólo a nivel edilicio y mobiliario sino además a nivel institucional”.