Marcos Ezequiel Pérez (18) murió tras recibir varias puñaladas en medio de una pelea con otro joven, que quedó detenido. Cuando tenía 14 años, a su vez, la víctima había matado a Tomás Beresiarte de la misma forma. Hay otro herido que debió ser internado en el Hospital Interzonal General de Agudos.
La 47ª edición de la Fiesta Nacional del Potrillo se tiñó de sangre este domingo a la madrugada cuando un joven de 18 años que cuando era menor había matado a otro de 24 fue asesinado a puñaladas en medio de una pelea ocurrida dentro del predio “Víctor Abel Giménez”.
La víctima fatal fue identificada como Marcos Ezequiel Pérez (18), atacado durante el enfrentamiento en el que también resultó herido en el tórax otro asistente a la celebración, que después debió ser trasladado al Hospital Interzonal General de Agudos (HIGA), en el que quedó internado.
Las circunstancias en las que fue asesinado Pérez son investigadas por el fiscal Ramiro Anchou, quien ordenó la aprehensión del principal sospechoso, de 21 años, en el mismo lugar del hecho. En ese marco, la policía debió llevarse al acusado del sitio con un cuidadoso operativo ya que un grupo de personas pretendía lincharlo minutos después del crimen.
De acuerdo a la información que pudo recabar LA CAPITAL, el instructor judicial ordenó que el detenido quedara alojado en la Unidad Penitenciaria de Batán y fuera citado a declarar como imputado este lunes, a primera hora, en Tribunales.
Marcos Ezequiel Pérez, el joven asesinado este domingo a la madrugada, había sido señalado, a su vez, como autor del homicidio de Tomás Beresiarte (24), ocurrido a la salida de un bar de Coronel Vidal en septiembre de 2021. En su momento, debido a que tenía 14 años, fue declarado no punible por la Justicia.
Tomás Beresiarte fue asesinado en Coronel Vidal.
Ese hecho sucedió el sábado 11 de septiembre de 2021, en la vecina localidad, donde se produjo una pelea en la que participaron al menos dos jóvenes. Conforme lo determinó, también en esa oportunidad, el fiscal Anchou, avalado por el juez de Garantías Juan Tapia, Pérez salió en defensa de uno de ellos, que era su hermano mayor, y apuñaló a Beresiarte, que luego murió.
Tras el relevamiento del jefe de calle de la policía vidalense, Rolando Leiva -por la pueblada que se desató-, se llevó a cabo una investigación en la que se secuestró un cuchillo que fue peritado y no coincidió con el que se habría utilizado para cometer el ataque mortal.
La investigación avanzó de esa forma y, para los pesquisas, ambos hermanos eran coautores del homicidio de la víctima. Debido a eso el mayor pasó detenido más de dos meses. Sin embargo, al tomar en cuenta la palabra de los diversos testigos del caso que vieron al más pequeño atacar a la víctima, la Cámara de Apelación y Garantías rechazó la responsabilidad del adulto y sólo quedó incriminado el menor.
Si bien se le dictó entonces una medida de encierro en un instituto de menores de La Plata, poco después al ser declarado no punible por su edad, regresó a Coronel Vidal, donde no había tenido, hasta el momento, ningún conflicto con la ley penal.