“Será una temporada para reinventarnos y aprender a convivir con el virus. La clave es seguir estando” definió el productor teatral Juan Alzúa, sobre la próxima temporada de verano.

Coincidiendo con otros colegas del rubro, el empresario reconoció que los meses que se vienen no serán para “ganar”, sino que el balance estará en “la seguridad, la salud y no perder”.

Así, mientras el sector aguarda la confirmación del protocolo oficial al que las salas teatrales deberán amoldarse para poder brindar una propuesta posible en este inusual contexto, apuntó que “todo lo que podemos, desde nuestra parte ya lo estamos haciendo”.

En una charla con LA CAPITAL, el productor resumió que los preparativos incluyen tratativas para espectáculos unipersonales o de elencos de no más de dos o tres integrantes, mucha responsabilidad con las medidas de cuidado y la apuesta a alternativas como el autoshow y el autocine. Asimismo destacó el compromiso de las salas comerciales de brindar espacio para que puedan realizarse propuestas de elencos independientes de la ciudad “los más golpeados por esta situación”, sostuvo.

Aseguró que mientras aguardan el protocolo oficial, para el Teatro Corrientes, que administra “ya compramos dos cabinas sanitizantes -una para cada ingreso- los tapetes e insumos de higiene como alcohol en gel. También estamos haciendo claraboyas en el techo para lograr una extracción de aire”.  Asimismo apuntó que “ganamos tiempo sacando hileras de butacas y estamos adaptando la señalización”.

Alzúa, quien también programa el Teatro del Ángel, que se encuentra en un subsuelo, en la popular calle Rivadavia, sostuvo que “los más afectados van a ser los teatros que están sobre la calle Rivadavia, que ofrecen espectáculos muy dinámicos y familiares del famoso paseo peatonal de los artistas, que rondan entre 200 y 300 localidades y ahí sí estamos analizando muy detenidamente si la reducción de la capacidad es al 30 o 35%”. De todas formas garantizó que “van a abrir, aunque sea para 50 personas. El tema a tener en cuenta es qué tipo de espectáculo hacer o qué tipo de convenios se pueden generar para que la facturación de esos teatros no sea muy baja”.

La programación, tanto en el Corrientes, como en el Teatro del Ángel será distinta a lo habitual: “no se va a poder armar espectáculos de gran envergadura, no solo por una cuestión de costos sino de garantía, si hay un caso o contacto con uno de los integrantes de un elenco, todo el grupo teatral, toda la compañía quedaría en cuarentena, entonces pensar en traer una compañía grande y de dos meses y medio cinco o seis días por semana es inviable”. Por ello “se van a organizar propuestas de stand up, unipersonales, algún teatro de texto de dos o tres intérpretes y, en muchos de los casos, itinerantes. Habrá una grilla con propuestas variadas, cada una de ellas ocupando uno o dos días de la semana”.

En cuanto a los “nombres” que podrían integrar esas propuestas, el productor aclaró que aún no están cerradas, pero confió que “estamos en conversaciones con Luisa Albinoni, Carmen Barbieri y Flavio Mendoza y Flor De la V”.

“Cualquier propuesta incluirá artistas marplatenses y, además estamos tratando de reunirnos con gente del teatro independiente, que ha sido la más golpeada en esta pandemia y trabajar en conjunto para dar una mano. La idea es destinar días de las salas nuestras a presentaciones de teatro independiente dado que con la limitación que en algunos casos les van a imponer, les va a ser muy difícil poder llevar a cabo las puestas en sus lugares”, aseveró.

Alzúa señaló que “esto es muy atípico, es vital que se defina que aforo vamos a tener. La manera de garantizar al público la tranquilidad y la seguridad es ateniéndonos a los protocolos que nos den y a su vez sumarle lo que podamos nosotros, que es lo que estamos haciendo”, y agregó que “ojalá lleguemos a una temporada donde la gente tome conciencia de la dificultad que estamos viviendo y la responsabilidad de entender que esto es algo serio. No hay que distenderse o llegar tranquilos, creo que hay que seguir preocupados y ocupándonos en esto”.

Y apuntó que “en este contexto difícil tenemos que reinventarnos para seguir estando y para que sea el inicio de comenzar a entender que se puede convivir con este problema si somos coherentes y hacemos las cosas bien”.

“Es un momento de aprendizaje y de estar atentos porque no podemos descartar que el día de mañana pueda volver a ocurrir”, aseveró.

Alternativas

Alzúa está trabajando con Nito Artaza en el doble proyecto del Autoshow y Autocine que se instalará en Punta Mogotes, para brindar una serie de entretenimientos alternativos para toda la familia y aprovechar un gran espacio, también, en el horario nocturno.

“Se va a inaugurar a mediado o a fines de noviembre y va a ser una propuesta alternativa y novedosa de entretenimiento para la ciudad y para los turistas, con una programación familiar”, indicó.

Las funciones serán a las 22.30 y está confirmada la propuesta de Nito Artaza y Cecilia Milone. Además “se está definiendo una grilla con shows de música con artistas nacionales y humor”.

“El autoshow que se está armando es una gran estructura con una muy buena pantalla de led para que se pueda disfrutar de los espectáculos”, sostuvo. Y agregó que para el Autocine “estamos en tratativas para ubicarlo en otro sector de los balnearios”.

“Alivio y alegría” de Petón Vinciguerra

El productor teatral Carlos Petón Vinciguerra, propietario del Teatro Victoria del circuito de calle Rivadavia, no pudo ocultar la alegría y el alivio, tras conocerse confirmarse que podrán abrir las salas teatrales, con protocolos, durante la próxima temporada de verano.

“Las ganas son tantas que ya estamos trabajando sobre los planos del teatro, sus sistemas de ventilaciones, etc. Como estamos en un primer piso tenemos ventanas y ciertas posibilidades para permitir correr el aire de manera natural”, indicó. Al mismo tiempo ya se encuentra determinando cuántos artistas pueden estar por escena en cada obra” según las dimensiones del escenario.

“El trabajo a realizar es arduo y con mucha consciencia. Queremos cuidar a nuestro público en su salud física y también espiritual: porque la cultura alimenta el espíritu y la cabeza”, remarcó.

“Esperamos pronto terminar de cumplimentar y delinear el protocolo para tener acceso a un verano diferente pero no por eso menos importante y esperanzador para nuestra familia”, finalizó.