Los taxistas de Mar del Plata sufrieron un notable descenso en la actividad con respecto al verano anterior y, si bien califican a la temporada como “aceptable”, preocupa la llegada del invierno, en el que buscarán mantener el nivel de trabajo que alcanzaron en estos primeros meses de 2021.

Desde el sector aseguran que durante enero y febrero padecieron una caída laboral de entre 30 y 40% en relación a los mismos meses del año pasado, aunque también reconocen que la situación “un poco levantó”, lo que “sirvió y ayudó” después de un “invierno muy bravo” por la pandemia y las medidas que se tomaron para evitar la propagación del coronavirus.

“Hay que mirar el punto de partida. No podemos soslayar que venimos de un invierno de pandemia y con gravísimas consecuencias económicas en todos los sectores. Partiendo de ese punto de vista esta temporada, que nosotros la calificamos de 6 puntos, está dentro de lo esperado porque no preveíamos algo mayor de esto”, indicó el presidente de la Sociedad de Conductores de Taxis, Raúl Vicente, en diálogo con LA CAPITAL.

No obstante, el también titular de “Servitaxi” aclaró: “Si en diciembre, que era un mes lleno de incertidumbre y de dudas sobre si se iban a levantar las restricciones, nos hubieran dicho que enero venían 830 mil personas y en febrero una cantidad inferior la verdad que todos hubiéramos firmado conformes”.

En la misma línea se pronunció el secretario general de la delegación Mar del Plata de la Federación Nacional de Conductores de Taxis, Miguel González, quien señaló: “Por como veníamos, de capa caída de la pandemia, nos ponemos contentos porque levantó un poco”.

En este contexto, Vicente consideró que fue “un acierto haber subido un 20% la tarifa para la temporada”, ya que esto permitió “que la gente que viniera se pueda mover en taxi y tratar de esa forma que el colectivo de la costa no se llenara y sea una foco de contagio”.

“Esto se dio en el mes de diciembre -recordó – y fue una mínima suba, porque la inflación del año pasado fue del 36%. Muchos taxistas estaban enojados y se preguntaban porque tenían que perder el 16%, pero esto permitió tener el precio bastante más reducido que en Capital y se trabajó muy parejo, dentro de todo de forma aceptable”.

A su vez, los taxistas señalaron que las restricciones horarias “limitaron el trabajo”, ya que durante la madrugada no hubo el movimiento habitual que generan los establecimientos gastronómicos, las cervecerías y los boliches.

“De 1 a 6 de la mañana era como que no había vida, como que Mar del Plata estaba desierta”, graficó González.

Por otra parte, los referentes de los trabajadores del volante coincidieron en que hubo meses de enero en los que el trabajo fue “muy bueno” y lamentaron las lluvias registradas durante el fin de semana largo de carnaval, las cuales ahuyentaron a parte de los turistas que tenían planeado visitar la ciudad.

La recuperación y el temor al invierno

Desde el sector de los taxistas perciben una recuperación en la actividad, luego de la brusca registrada a partir de las medidas adoptadas por el gobierno nacional para evitar la propagación de la pandemia de coronavirus.

“Sobrevivimos varios meses trabajando entre un 20 y un 30% de lo que era nuestro trabajo normal, hoy estaremos en un 70%”, indicó Vicente, mientras que González explicó: “En plena pandemia hacíamos 6 o 7 viajes en 12 horas y nos poníamos contentos. Hoy hacemos entre 19 y 18 y es una alegría. Veníamos muy golpeados, pero ahora hay que apuntar a mantener el mismo flujo de viajes. Si lo mantenemos vamos a tener un invierno mucho mejor que el del año pasado”.

En este plano, ambos coincidieron en la preocupación que genera la llega del invierno, no tanto por las restricciones que parecen ir quedando atrás, sino por la economía que pueda presentar la ciudad tras un año y una temporada atípica.

“No escapamos a la realidad de que no alcanza la plata, está todo muy caro y si no tenemos 16 o 17 viajes por turno se nos va a poner todo muy complicado”, sostuvo con preocupación el secretario general de la delegación local de la Federación Nacional de Conductores de Taxis.

Por su parte, Vicente añadió: “Pasamos un invierno muy duro y lamentablemente avizoramos uno muy complicado porque la situación económica con que queda la ciudad al tener una temporada aceptable, no buena. Va a estar complicado porque muchos sectores no van a recibir ayuda del estado como el año anterior”.

Para finalizar, el titular de Servitaxi dejó una frase para ilustrar cómo es la actividad en la ciudad, basándose en sus años de experiencia en el sector: “El taxi es un reflejo de lo que pasa en la ciudad, nosotros nos movemos a su ritmo. Cuando tenemos una temporada turística buena, como fue la del 2020, el taxi se manifiesta de la misma forma, pero si la ciudad está mal, el taxi está mal”.

Expectativa por la vacuna

González también se refirió a la preinscripción que se realizó en la sede local de la Federación Nacional de Conductores de Taxis, ubicada en 14 de Julio 3155, destinada a trabajadores del volante que quieran recibir la vacuna contra el coronavirus.

El organizador de esta iniciativa afirmó que en el lugar, en solo tres horas, se inscribieron unos 450 choferes, la mayoría taxistas, pero también algunos remiseros, para manifestar su voluntad de ser inoculados contra el Covid-19.

En este contexto, los taxistas manifestaron su deseo de tener prioridad en el plan de vacunación, al ser considerada su actividad esencial, en el marco de la pandemia.

“Ojalá que la vacuna ayude para que se vayan cortando los contagios y se abran más actividades”, deseó González, aunque remarcó que “lo principal” para mantener el ritmo laboral será “que mejore la economía de los trabajadores, porque el trabajador, estando bien económicamente, consume”.