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Deportes 8 de diciembre de 2018

La demostración de Quilmes merecía un premio diferente

El "tricolor" cayó en el final ante el poderoso Quimsa en su debut en la edición 2018/19 de la Liga Nacional. Los santiagueños se llevaron dos triunfos de la ciudad.

Leonardo Mainoldi frena la penetración de Sebastián Morales.

por Marcelo Solari

A Quilmes se le desmoronó el castillo que con tanto empeño había construido en apenas dos minutos. Los 120 segundos finales, en los que Quimsa logró quedarse anoche con la victoria, por 86 a 84, en el estreno del “tricolor” en la Liga Nacional de Básquetbol. Una entrega para elogiar, de un equipo disminuido -tras la salida de Omar Cantón tiene dos fichas menos-, que se quedó con las manos vacías cuando el premio bien pudo haber sido otro. Negocio redondo para los santiagueños, que se llevaron dos triunfos de su paso por Mar del Plata.

El buen y prometedor comienzo de Quilmes en el partido no fue una leve brisa, sino un viento intenso que se atravesó en el camino de Quimsa. De arranque mostró una gran efectividad y tomó ventajas de 12-6, en un marco de posesiones cortas y de cambiar pelota por pelota, algo que no parecía tan aconsejable frente a un oponente con tantos recursos. Sin embargo, cuando fue perdiendo eficacia adelante, se multiplicó defensivamente, dificultándole la vida a un adversario que en nada se parecía al de 48 horas atrás, frente a Peñarol.

La voz de mando la llevó Eduardo Vassirani, quien le ganó el duelo por goleada a Torin Francis en todo el primer tiempo. El impecable trabajo del pivote (10 puntos, 5/5 en cancha) resultó vital en ese capítulo de apertura, al cabo del cual el local se llevó una ventaja inesperada de 9 puntos (22-13).

Y la extendió a 25-13 apenas volvieron a la acción. Ventaja acaso irreal de acuerdo a las previsiones, pero absolutamente ajustada a lo que se veía en la cancha. Quilmes ponía todo su empeño y los santiagueños parecían aletargados, como con una marcha menos.

Para otorgarle descanso, Javier Bianchelli prescindió de Vassirani, y del otro lado, en el ajedrez táctico, Silvio Santander mandó a sus dos centros a la cancha: Francis y Roberto Acuña. Y frente a Maximiliano Maciel y Sebastián Morales, los internos visitantes contribuyeron a un parcial rotundo de 9-0 en tres minutos. Sin embargo, retornó Vassirani, tan impiadoso como se había ido al banco, y Quilmes recuperó el dominio de las acciones.

Y aunque ya no volvió a disfrutar de ventajas tan importantes, el “tricolor” sostuvo el control y consiguió llegar al descanso largo con una ventaja de dos posesiones, en parte capitalizando las notorias distracciones de una defensa santiagueña demasiado permisiva.

El viento de cola continuó empujando a Quilmes en la primera parte del tercer cuarto. Aunque Quimsa controló hasta casi anular la incidencia de Vassirani, el local logró conservar la delantera en el resultado. Cada vez con menos margen, es cierto. Porque los norteños interpretaron que el negocio era jugar cerca del canasto, y el mejor ejecutor fue Acuña. Cargando el juego interior y también al rebote ofensivo, el visitante consiguió igualar en 51 a los 5 minutos.

Entonces hicieron su aparición los tiradores. Fueron tres triples seguidos (Mateo Bolívar, Maciel y Lucas Ortiz), y cerca del final del segmento, otra más de Bolívar, ante inadmisibles ventajas otorgadas por el oponente, lo que de ninguna manera le quita méritos a lo hecho por los jugadores del local.

La ventaja de 8 puntos era buena pero para nada definitoria al encarar el último cuarto. El desgaste de un esfuerzo conmovedor comenzó a pasar su factura, y físicamente Quimsa impuso su rigor.

Los de Santander insistieron una y otra vez en la pintura, erosionaron cada vez más al local, expusieron un gran dominio del rebote y llegaron al cierre en igualdad de condiciones, después de haber corrido de atrás durante todo el juego. Mayor resto por disponibilidad de personal y jerarquía individual para superar a una mejor expresión colectiva. Parámetros que terminaron inclinando la balanza para quien, tal vez, menos hizo por quedarse con la victoria. Sin embargo, Juan Brussino, quien venía de “romperla” frente a Peñarol, apareció en todo su esplendor en el tramo final. Anotó 6 de los últimos 8 puntos de Quimsa, y le quitó la ilusión a Quilmes, que parecía encaminado al suplementario.

Síntesis

Quilmes 84

L. Tantos 0, L. Ortiz 21 (x), M. Bolívar 20, S. Morales 8 y E. Vassirani 26 (FI). M. Maciel 3, V. Fernández 3 y J. E. De la Fuente 3. DT: Javier Bianchelli.

Quimsa 86

J. Brussino 18, L. Schattmann 7, C. Fells 8, L. Mainoldi 15 y T. Francis 15 (FI). F. Aguerre 11, T. Allende 0, G. Mendes da Silva 0 y S. Lugo 0. DT: Silvio Santander.

Estadio: Polideportivo Panamericano “Islas Malvinas”.
Arbitros: Daniel Rodrigo, Pedro Hoyo y Sebastián Moncloba.
Parciales: 22-13, 42-38 y 67-59.



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