Todos los sábados de enero a las 21, la película documental La vuelta de San Perón, del director Carlos Müller, podrá verse en el Club del Teatro, en una actividad organizada por el Cineclub Dynamo, que funciona en el interior del Espacio Bronzini en Rivadavia 3422. El filme tendrá su avant premire, en una función privada, este jueves.

Se trata de un filme armado a partir de un hallazgo: las cintas de un corto realizado en la década del ´70, titulado San Perón, filmado en blanco y negro. Allí aparece Norma, una mujer de extrema humildad y madre de diecisiete hijos, que se esperanza con la llegada de Juan Domingo Perón a la presidencia de la Nación, mientras organiza el cirujeo diario junto a sus hijos y hijas.

La historia de este corto misterioso, del que no se sabía su director ni el contexto en que fue filmado, de a poco empezó a completarse, hasta dar por resultado una película en la que se ponen de manifiesto varios aspectos: la capacidad del cine como constructor de memoria y el desamparo de una gran porción de la población.

Para Müller, la aparición de la película “se fue dando de a poco”. “Primero por el entusiasmo que generó el corto en los espectadores, luego la aparición del director y la familia fueron conformando algo que hacía pensar que ahí había una película”, expresó a LA CAPITAL.

-La vuelta de San Perón es un elogio al cine como recuperador de la memoria: memoria colectiva y memoria familiar. ¿Coincidís?

-Sí, claro, creo cine es el lugar por excelencia donde habita la memoria del siglo XX. En el corto San Perón encontramos las dos memorias conviviendo de manera armoniosa. Es una madre que muestra su vida familiar y, a la vez, expresa sus ilusiones ante la vuelta de Perón.

-Además, detrás de la anécdota de la película también se percibe la fuerza de los “desangelados” o de “los descamisados”. Es una película sobre un país que no pudo resolver sus dilemas?

-Una vez que comencé a conocer a los hijos de Norma me di cuenta de que ellos se veían ante todo como chicos felices. Más allá de las limitaciones que sufrían, que son evidentes. La película es más sobre una familia y un momento político puntual que sobre el país. Ahora, ya que lo mencionás, sí creo que que ningún gobierno pudo ni quiso realmente con ganas sacar a esos excluidos de la pobreza. Ningún gobierno se pareció siquiera, en lo que a movilidad social ascendente se refiere, al primer gobierno de Perón y Evita.