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Opinión 22 de febrero de 2016

La temporada que no soñamos

por Javier Faroni

Verano tras verano, los que hacemos temporada desde hace tantos años en las distintas plazas teatrales, soñamos desde muchos meses antes con una temporada gloriosa… con aquella temporada soñada en la que todos los teatros exploten de espectadores. Bueno… esto no siempre pasa, por distintos motivos que serían largos de analizar y que año a año pueden cambiar.
Este verano tuvimos una de estas temporadas que no soñamos. Esto, claro, en términos generales y no personales ya que la visión de uno puede estar cargada de su acierto o error a la hora de elegir qué produce.
En Mar del Plata seguramente estaremos cerca del 45% menos de espectadores con relación a la temporada anterior, realmente preocupante pensando además que hubo menos espectáculos centrales en La Feliz que otros años. Algo similar ocurrió en toda la Costa Atlántica con los espectáculos que recorren esas plazas. Aunque cabe destacar que la calidad de títulos y nivel de espectáculos fueron realmente de primera calidad y es loable que año tras año se mejoran las propuestas de producción y el nivel de actores. Seguramente a la hora de buscar las excusas de porqué no fue la temporada soñada hay dos razones que salen a luz como prioritarias. Una de ellas es la gran cantidad de turismo de clase media, sostenes históricos de esta ciudad, que por distintas razones este año fueron a veranear a países vecinos (Brasil, Chile, Uruguay) y que llegan a cifras -según los especialistas- de casi 3 millones de espectadores. Esto evidentemente hizo bajar la cantidad de turismo en las plazas tradicionales de veraneo y sin duda afectó no solo al teatro sino al resto de las actividades ligadas al consumo de turismo. Otra de las razones fundamentales, y esto es algo que viene pasando en los últimos años, es que la cantidad de pernoctes en promedio que el turista pasa en estas ciudades es de 4 o 5 noches y no ya los 15 o 30 días que hace años se tomaban las familias para veranear. Esto hace que la gente tenga menos noches disponibles para disfrutar teatro viendo afectada notoriamente la actividad.
Pero más allá del análisis frío, hay algo que los amantes del teatro no vamos a perder nunca y es el seguir soñando para la próxima temporada. Y esos sueños ya se empiezan a convertir en realidad cuando uno, aún sin haber terminado esta temporada no soñada, ya está confirmando éxitos de Buenos Aires como “El otro lado de la cama” o “Casa Valentina” para el verano 2017 en Mar del Plata. Esto pasa porque el teatro tiene muchas virtudes pero una fundamental y es que es ignífugo. Soporta cualquier crisis económica o social, cambios de horarios, climas, devaluaciones o modas… El teatro Siempre Sigue Vivo!!!

Productor teatral.



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