El domingo radiante cerró una doble fecha sensacional para el karting zonal. La séptima fecha entregó formidables batallas en la pista y los campeonatos están abiertos en casi todas las categorías.

Fueron tantas las buenas carreras, que sería injusto priorizar algunas sobre otras, y por lo tanto, el orden cronológico se impone para dar cuenta de lo sucedido en el Kartódromo “Ciudad de Mar del Plata”.

Entre los más pequeños de la Promocional, Manuel Calamante prevaleció por ventaja mínima sobre sus perseguidores, Patricio Rocca (segundo) y Alan Arrechea (tercero). Menos de un segundo de distancia separó a los tres pilotos al cruzar la línea de sentencia.
Las averías dejaron a la final de Sudam Senior sin dos protagonistas (Rodrigo Maldonado y Luciano Di Scala) demasiado temprano. Y en ese marco, Joaquín Ariño hizo correctamente su trabajo para imponerse, por delante de Agustín Sala -segundo- y Lisandro Ramos -tercero-.

Muy meritorio resultó lo de Luciano Sobles, ganador en Junior. A pesar de que afrontaba una durísima oposición, se las ingenió para marcar el camino. Su tránsito contundente en la curva 1, al final de la recta principal y en sentido inverso, le permitió construir una ventaja inapelable. Parecía ir sobre rieles en esa variante. Lo escoltaron Rocco Moreno y Fabrizio Lombardo, quien avanzó un par de lugares con buenas maniobras.

En Graduados, el que mejor negocio hizo, sin dudas, fue Germán Celia, el líder del campeonato, quien cosechó un segundo puesto (en la primera final) y un triunfo (en la segunda). En la carrera inicial se impuso Néstor Vidosa y tercero llegó Guillermo Bakker, quien también intentó ofrecerle lucha a Celia como escolta en la segunda. Completó el podio Oscar Divitto.

Impecable resultó la conducción de Santino Bartucci. Para elogiar. Aguantó las embestidas de Franco Ledesma en una carrera sin tregua y logró un triunfo súper festejado. Tercero llegó Agustín Cocco, otro de muy buena performance. Sin embargo, a pesar de los tres destacados, el espectáculo más saliente en pista lo ofreció el campeón, Nahuel Morón, quien a poco de largar quedó último y protagonizó una remontada formidable que lo llevó al cuarto puesto final. Si bien se vio beneficiado por el procedimiento de “slow”, a causa de un accidente múltiple en el ingreso a la recta principal, escaló posiciones de una manera impactante.

Para cerrar la tarde, su padre, Marcelo Morón, se impuso de punta a punta en la Masters, en otra final muy interesante, tras aguantar durante las 20 vueltas los intentos de Diego Garridos (segundo). El puntero del certamen, Julián Muro, mantuvo un duelo fantástico con Guillermo López y Damián Cassino para adueñarse del tercer puesto. Premio a la combatividad para Cristian Di Scala, quien había quedado último y muy lejos del pelotón, aunque se las ingenió para superar rivales vuelta tras vuelta y llegó octavo.