“Las telenovelas tienen algo de placer culposo, nos encantan, pero nos cuesta admitirlo”, define el actor y director Leo Rizzi, sobre “Tu falta de querer”, el espectáculo que cuenta, a la manera de un culebrón clásico latinoamericano, un capítulo de una exitosa telenovela.

Tras haber obtenido durante la temporada 2020 el premio Enrique a la mejor dirección, la puesta volvió a subir a escena este verano, en el Teatro Auditorium y en la Villa Victoria, donde tendrá una nueva función este miércoles 24 de febrero a las 21.

En Tu Falta de Querer no faltan todos los ingredientes típicos del género y los intérpretes cuentan una historia en la que aparecen, cantadas en vivo, las canciones más reconocidas del repertorio latino. “El público se ríe de lo que ya conoce: los textos a cámara, los lugares comunes, los hijos perdidos, las amnesias repentinas”, señala.

El elenco de la obra está conformado por Mona De Marco, Macarena Riesco, Oscar Miño y el propio Rizzi. Además, cuentan con la ejecución de piano en vivo de Axel Otarola y el aporte audiovisual dirigido por Carpincho López, recurso a través del que hacen su aparición grandes actores invitados como María Cámpora, Diego Scarpello e Ignacio Beramendi. La asistencia de Santiago Trigo y el diseño de luces de Federico Cordeiro.

-¿Cómo nació “Tu falta de querer”? ¿En qué época y estilos de novelas se basaron para esta puesta?

-“Tu falta de querer” nace a principios del 2019 cuando con Oscar (Miño) decidimos hacer una comedia musical, un género que cruce teatro y música. Convocamos a Mona De Marco y Macarena Riesco y con el elenco completo, les propuse trabajar el mundo de las telenovelas de los ’90, de la televisión del Canal 9 de Romay. Esas telenovelas habladas en neutro que todos conocemos: La extraña dama, Topacio, Cristal, Esmeralda… De hecho, nuestra protagonista se llama Lapislázuli…

-¿Qué potencial tiene hacer esta obra en clave de parodia?

-Las telenovelas tienen algo de “placer culposo”, nos encantan, pero nos cuesta admitirlo. La parodia trabaja con todos estos presupuestos: el público se ríe de lo que ya conoce: los textos a cámara, los lugares comunes, los hijos perdidos, las amnesias repentinas.

-¿Cuál creen que es el “secreto” del atractivo de esta propuesta?

-Me parece que se juntan varias cosas: una propuesta novedosa, un gran elenco y mucho cuidado en todos los detalles, desde lo fílmico que acompaña la obra, hasta el vestuario, la escenografía y tener a un gran pianista como Axel Otarola tocando en vivo.

-¿Cuáles son las particularidades de la puesta en escena? ¿Cómo se combina lo audiovisual en el escenario?

-Como hablamos del mundo de las telenovelas, necesitábamos un soporte que de “verdad” a esta novela noventosa que inventamos “Tu falta de querer”. Y ese soporte es lo fílmico que aparece como “En el capítulo anterior…” clásico del género. Y se cuenta un poco la prehistoria de los personajes y como llegan al capítulo que vas a ver, con mucho humor también. Y ahí tenemos la mirada de Carpincho López, que tiene un humor muy sutil e ingenioso.

-¿Cómo van sintiendo ustedes, como actores, la obra con el correr de las funciones?

-Cada función estamos más contentos y ajustados, cada vez el juego entre nosotros y con el público va creciendo más, en realidad… ¡No nos queremos bajar del escenario!

– ¿Qué les genera la posibilidad, después de tantos meses de parate el año pasado, de poder hacer varias funciones?

-Nosotros dudamos mucho en volver, necesitábamos un espacio que nos diera a nosotros y a los espectadores las garantías posibles. Y cuando nos llegó la propuesta de Villa Victoria nos cerró todo porque las ganas de reencontrarnos con el público eran muchas.

-¿Qué balance pueden hacer de esta rara temporada?

-En esta rara temporada nosotros pudimos agotar los aforos en todas las funciones y eso nos hace sentirnos muy agradecidos con el público que nos sigue y apoya.

-¿Cómo ven el escenario teatral marplatense de cara al invierno que se viene?

-Tenemos que esperar como sigue la situación sanitaria. El teatro es un lugar seguro con todos los protocolos, pero el contexto determina. Yo creo, espero que se pueda seguir con la actividad teatral, no solo por todos los compañeros que vivimos de esto, sino también porque el teatro es un lugar de encuentro que hace bien. Lo que más sufrimos el año pasado es no poder encontrarnos. Y encontrarnos sana, nos levanta las defensas. Es nuestro lugar de militancia.