Llega la hora de la verdad. El fin de las especulaciones, vaticinios y pronósticos. El domingo, 569.560 marplatenses y batanenses estarán en condiciones de darle forma a la gran encuesta electoral local y “seleccionar”, de entre 20 candidatos a intendente, (entre otros cargos a definirse), quienes tomarán parte de la verdadera elección a concretarse en octubre. El domingo entonces quedarán en pie cuatro o, en el mejor de los casos, cinco aspirantes a jefe comunal de General Pueyrredon, los cuales superarán el 1,5% de los votos válidamente emitidos. Las miradas desde las grandes fuerzas políticas nacionales se posarán en Mar del Plata, convertido en el segundo distrito electoral, en importancia, de la provincia de Buenos Aires, con una cantidad de votantes que supera al de varias provincias.

¿Qué se define este domingo en Mar del Plata, la provincia y la Nación? En el plano local, el intendente Guillermo Montenegro, de alguna forma plebiscitará su gestión de cuatro años, buscando el apoyo para un nuevo período de gobierno. La boleta de Montenegro acompañará -uno de los dos casos que se darán en la provincia- a la de los animadores nacionales de la gran contienda de Juntos por el Cambio, Patricia Bullrich y Horacio Rodríguez Larreta. El domingo a la noche Juntos tendrá definido su candidato o candidata presidencial al tiempo que también quedará determinado si Néstor Grindetti (Bullrich) o Diego Santilli (Larreta) tendrán la misión en octubre de intentar quedarse con el sillón que hoy ocupa Axel Kicillof en la gobernación bonaerense. También el domingo se definirá el futuro político de otro marplatense, Maxi Abad, quien en caso de imponerse la lista de Bullrich aspirará a ser senador nacional. De lograrlo, se convertirá en el primer senador nacional marplatense de la historia. Juntos por el Cambio, en definitiva, no tendrá competencia interna en el plano local, pero si será más que atractiva la contienda en el plano provincial y nacional. Asimismo, quedará sellada la suerte de Diego Garciarena, Sofía Pomponio, Fernando Muro, Patricia Aldana Echeverría, Johanna Panebianco y Emilio Sucar Grau (precandidatos a diputados provinciales) y de Emiliano Giri (precandidato a diputado nacional), entre otros marplatenses.

En cuanto a Montenegro, espera confiado la prueba del domingo. Además de recibir a los principales exponentes de Juntos por el Cambio -en los últimos días tuvo fotos con Horacio Rodríguez Larreta, Diego Santilli, Patricia Bullrich y Néstor Grindetti, entre otros-. mantuvo encuentros con vecinos, y el sábado estuvo en la final del Regional Pampeanos A de Rugby donde se coronó campeón su Mar del Plata Club, oportunidad en la que dialogó con decenas de personas que se aceraron a saludarlo. Y el lunes, como todos los años, el intendente se acercó a celebrar la tradicional misa de San Cayetano junto a miles de marplatenses que acuden a agradecer al Patrono del Trabajo en lo que fue la última presencia de monseñor Gabriel Mestre en esta celebración como obispo de Mar del Plata ya que en algunas semanas se hará cargo del arzobispado de La Plata. Fueron muchos los fieles que peregrinaron con la sorpresa de caminar junto a Montenegro, quien afirmó que “si hay algo de lo que se trata esta fecha es de dar gracias por el laburo, de reflexionar juntos sobre la importancia de poder llevar el pan a nuestras casas”, para luego agradecerle al Obispo por “la calidez y el compromiso de siempre.”

Por el lado de Unión por la Patria, se producirá el debut electoral, a nivel local, del recientemente conformado Encuentro Marplatense, con el sello de Fernanda Raverta, titular de la Anses que pretende convertirse en la futura intendenta de la ciudad, y del ex intendente Gustavo Pulti quien buscará ser diputado provincial tras los comicios de octubre. Si bien no tendrán competencia interna a nivel local, el domingo Raverta y Pulti medirán la temperatura del electorado intentando plasmar un piso importante de votos para jugarle el “mano a mano” a Montenegro en octubre. Asimismo, será la oportunidad de probar si logran fusionase los votos que hace cuatro años se llevaron el Frente de Todos y Acción Marplatense, cuando sumando a ambos superaron a los logrados por quien resultara finalmente elegido intendente. El domingo 27 de octubre de 2019, Guillermo Montenegro lograba el triunfo en las elecciones de General Pueyrredon, obteniendo 168.385 votos, y aventajando a Fernanda Raverta (158.673, con lo cual ingresaron cinco concejales) por sólo 9.712 sufragios. En tanto, Gustavo Pulti, como candidato de Acción Marplatense obtenía 46.176 adhesiones, con lo cual ingresaron dos concejales de su fuerza. Si se sumaban los votos obtenidos entre Raverta y Pulti (lo cual no siempre es lineal) se llegaba a los 204.849, o 36.464 más que los que cosechó el actual jefe comunal.

Para el peronismo, quedarse con la intendencia de Mar del Plata es una obsesión. Raverta, en esta campaña, contó con el respaldo total de los máximos referentes provinciales y nacionales de su fuerza. Los desembarcos de ministros fueron moneda corriente. Días atrás fue el gobernador Axel Kicillof quien dedicó toda una jornada a desarrollar actividades en la ciudad. Para el mandatario bonaerense, en estas elecciones que se vienen, también cada voto vale oro en su ambición por la reelección. Contrariamente con lo que sucede para presidente, donde todo parece indicar que habrá balotaje en noviembre, la gobernación de la provincia puede ganarse por apenas un voto de diferencia. Otro fuerte espaldarazo recibirán este miércoles los candidatos de Unión por la Patria y Encuentro Marplatense, cuando reciban la visita del precandidato presidencial y ministro de Economía, Sergio Massa. “Encuentro Marplatense -señalan entusiasmados Raverta y Pulti- no es un simple acuerdo electoral, sino un nuevo espacio que viene a poner nuevamente en primer lugar el interés de gobernar en función de un programa, con metas y objetivos precisos, para que los problemas verdaderamente se resuelvan”. Finalmente, en un encuentro con los equipos técnicos realizados en el teatro Roxy, la candidata a intendenta reiteró que hay “un municipio paralizado con barrios olvidados”.

“Para nosotros Mar del Plata es un bastión clave”, señalaban en las últimas horas desde el corazón del “massismo”. El actual ministro de Economía pretende que el lunes el título de los diarios marque que él fue el candidato que más votos logró individualmente aunque a nivel partidario, según las encuestas, quizás se imponga Juntos por el Cambio a partir de la sumatoria de votos de Larreta y Bullrich. En la interna partidaria, Massa tendrá enfrente a Juan Grabois dispuesto a ir por más de cinco puntos que cotizarán en Bolsa a la hora de la sumatoria final. Se quedará Grabois con adhesiones incluso de muchos kirchneristas que en las PASO no votarán a Massa pero si lo harán seguramente por el candidato del oficialismo a la hora de la verdad en octubre. El panorama ideal para Massa, señalan desde su entorno, es convertirse el domingo en el más votado para enfrentar en octubre, preferentemente, a Patricia Bullrich, con dos modelos antagónicos que llevarían a una polarización casi extrema, apostando a quedarse con muchas de las voluntades que recogerá el actual jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, e incluso los votos que logre obtener el cordobés Juan Schiaretti con Florencio Randazzo como compañero de fórmula de “Hacemos por nuestro País” donde la marplatense Mónica Biasone va como precandidata a diputada nacional en tercer término. Especulaciones, en definitiva, que comenzarán a dilucidarse a partir del próximo fin de semana.

Claro está que hay una tercera fuerza que generará también expectativas el domingo próximo. Será la hora de la verdad para Javier Milei, el líder de La Libertad Avanza. Se podrá saber en la medianoche del domingo como queda parada la fuerza de los libertarios y si se llega al pregonado escenario de tercios compartido con Juntos y Unión por la Patria. Milei, todo parece indicarlo, se convertirá en el árbitro de lo que resta electoralmente hasta que se defina el próximo presidente. Los votos que obtenga este domingo serán más que anhelados en octubre por Massa o por Bullrich o Larreta, y más aún en caso de llegarse a un ballotage. También se determinará en pocos días si el verborrágico economista liberal “pesca” más votos en sectores afines al peronismo o al del PRO-UCR o indistintamente se lleva desilusionados de ambas escuderías.

En el plano local, La Libertad Avanza tendrá un testeo importante el domingo ya que todo parece indicar que conseguirá votos como para, en octubre, quedarse con dos concejales (Luis Recalt y María Cecilia Martínez), algo más que interesante para una fuerza política nueva. Y los más entusiastas no descartan que puedan acceder incluso a una tercera banca. Asimismo, será interesante determinar el porcentaje de votos que logre el precandidato a diputado provincial que encabeza la lista de la quinta sección electoral, el actual concejal Alejandro Carrancio, quien se erigió en uno de los armadores de La Libertad Avanza en la región. Un triunfo claro lo catapultará a la mesa de la toma de decisiones de los libertarios, teniendo en cuenta que podría llegar a contar también con cerca de una veintena de concejales del riñón propio diseminados en las distintas ciudades y distritos de la región. Otra marplatense, Juliana Santillán, en tanto, podrá convertirse en diputada nacional, ampliando la lista de representantes de la ciudad en las futuras legislaturas, tanto provinciales como nacionales.

Párrafo aparte para la participación ciudadana. ¿Descenderá notablemente el porcentaje de concurrencia a las urnas de marplatenses y batanenses con respecto a comicios anteriores (71,35% en las PASO del 11 de agosto de 2019 y 63,06% en las del 12 de setiembre de 2021), en sintonía con lo que ha sucedido ya en comicios provinciales, evidenciando un desencanto de la ciudadanía? ¿Será importante el porcentaje de votos en blanco en General Pueyrredon (4,08% en 2019 en el rubro intendente y 7,89% para gobernador y vice y 4,91% y 6,56% respectivamente en 2021)? Al margen de las especulaciones, en los distintos bunkers políticos locales se sigue con preocupación el tema. Cuando en la Argentina la participación electoral suele ser alta (en promedio, en las primarias más de un 76% del padrón concurre a votar y en las generales el número supera el 80%), este año, de las 16 provincias que ya eligieron gobernador, en siete la media no alcanzó el 70%. En las PASO de Santa Fe y en los comicios municipales de Córdoba apenas fue a votar el 60%; en Chaco, afectado por la desaparición de Cecilia Strzyzowski, el porcentaje fue 63%; mientras que en Mendoza un 66% del electorado emitió su sufragio y es el distrito con mayor caída en la comparación con 2019, cuando votó el 79,1% de la población.

En otro aspecto, por el lado de la izquierda se vivirá la única pelea interna a nivel local, estimándose que el candidato ganador logrará superar el piso del 1,5 de los votos válidos (8.500 en caso de que vote todo el padrón habilitado), para encaminarse a las generales y aparecer entre las cuatro o cinco opciones que tendrán marplatenses y batanenses en octubre en el cuarto oscuro. La izquierda presentó cuatro listas para competir en las primarias del próximo 13 de agosto en General Pueyrredon: habrá internas en el Frente de Izquierda y los Trabajadores Unidad (FITU), y otras dos nóminas competirán por fuera. Por un lado, el Partido Obrero (PO) y el Movimiento Socialista de los Trabajadores (MST), lleva como precandidato a intendente de General Pueyrredon al histórico dirigente Alejandro Martínez. Por otro lado, el Partido de los Trabajadores Socialistas (PTS) impulsa la precandidatura a intendente de Rosa Mauregui, trabajadora estatal y referente del PTS y de la agrupación de mujeres Pan y Rosas. Por fuera de la alianza, habrá dos listas más en Mar del Plata. El Nuevo MAS lleva a Marcos Pascuán como precandidato a intendente en la lista que a nivel nacional encabeza Manuela Castañeira y también se sumó Política Obrera, que llevará como precandidata a intendenta a María Fernanda Díaz.

Esquivando boletas dispersas por las calles, al menos de las principales fuerzas -sepa el lector que cada una de ellas tiene un costo de al menos 30 pesos, en lo que constituye un verdadero despilfarro de dinero y de recursos que podría evitarse con la implementación del voto electrónico-, los armadores políticos locales aguardan con ansiedad la apertura de las urnas para que sean develadas las incógnitas. Se sabrá el domingo si los encuestadores vuelven a fallar en sus pronósticos y análisis como ha venido sucediendo en las últimas elecciones provinciales, en muchos casos, aducen, porque la gente, cansada de los políticos, se niega a confesar sus preferencias en la previa. Las preguntas se multiplican. ¿Conseguirá Nicolás Lauría mantener en octubre su candidatura a intendente? ¿Quedará despejado el camino de Montenegro hacia la reelección con un porcentaje de votos que le permita soñar con contar con mayoría propia en el Concejo Deliberante para al menos sus dos primeros años del segundo mandato? ¿Obtendrá Raverta las adhesiones necesarias, en su asociación con Pulti, como para llegar a octubre con el claro objetivo de sentar en el despacho principal de la comuna a un representante del peronismo? ¿Se convertirán los libertarios en la gran sorpresa o todo quedará en un despliegue escénico y mediático de vuelo corto? ¿Afectará al oficialismo -en verdad, oposición en Mar del Plata- la actual situación económica a la hora de los votos? ¿Será importante el corte de boleta o llegará a porcentajes ínfimos sin lograr mover el amperímetro?

Y los interrogantes se multiplican. ¿Será Patricia Bullrich o Rodríguez Larreta quien intentará que el PRO de Mauricio Macri vuelva a tener la posibilidad de gobernar el país? ¿Podrá el ganador/a de la contienda de Juntos capitalizar los votos del derrotado/a a partir del mismo lunes o habrá pases de factura, heridas sin cicatrizar o migraciones? ¿Será capaz Massa, en su doble rol de ministro y precandidato, de cohesionar al “mundo peronista” de gobernadores, dirigentes sociales, sindicalistas e intendentes detrás de su candidatura de unidad tras las tensiones de los últimos tiempos entre quienes se encontraban alineados junto a Cristina Kirchner o a Alberto Fernández? ¿Los votos de las primarias que obtenga Grabois irán automáticamente a Massa en octubre o un alto porcentaje de los mismos será capitalizado por los representantes de la izquierda?

También en Mar del Plata, aunque en menor medida, claro está, que lo que se definirá a nivel provincial y nacional, desde el domingo comenzará una nueva etapa. Hasta el momento, la campaña en el distrito se caracterizó por discusiones y chicanas entre representantes de las principales fuerzas a través de las redes sociales, prioritariamente en torno a la relación de los gobiernos de Kicillof y Fernández con el de Montenegro. Discriminación o no discriminación en el envío de fondos fue la cuestión principal puesta sobre el tapete. En cuanto al resto, los exponentes políticos locales actuaron prácticamente como partenaires de las visitas de los candidatos provinciales y nacionales, sin grandes actos, con recorridas y visitas a industrias y comercios, pero sin debate sobre los grandes temas que preocupan a los marplatenses y batanenses. Una discusión que, se estima, irrumpirá de cara a las elecciones de octubre. Seguirán las visitas, claro está, pero también habrá espacio para el saludable debate en torno al futuro de la ciudad. O al menos, es lo que debería esperarse de quienes pugnan por convertirse en los futuros representantes, en los próximos cuatro años, de marplatenses y batanenses.

En tanto, si algo se observó a la hora de diagramar estrategias electorales desde las principales fuerzas políticas fue la importancia que se le asignó a Mar del Plata y a la quinta sección electoral. En la provincia de Buenos Aires se votarán ocho categorías a lo largo de los 135 municipios que están agrupados, a su vez, en secciones electorales. General Pueyrredon está ubicada en la Quinta, una de las más gravitantes a nivel provincial e incluso nacional. La 5ta cuenta con 27 distritos: Ayacucho, Balcarce, Castelli, Chascomús, Dolores, General Alvarado, General Belgrano, General Guido, General Lavalle, General Madariaga, General Paz, General Pueyrredon, La Costa, Las Flores, Lezama, Lobería, Maipú, Mar Chiquita, Monte, Necochea, Pila, Pinamar, Rauch, San Cayetano, Tandil, Tordillo y Villa Gesell. Asimismo, en total, acumula 1.267.213 electores, casi el 10% del padrón bonaerense. Debe apuntarse a la vez que la Provincia acumula el 37% de los votantes habilitados a nivel país. Dentro de la Quinta, General Pueyrredon acapara el grueso del padrón con sus 569.590 (44%) de los electores, secundado por Tandil con 115.004 (9%). Más atrás aparecen Necochea con 86.656 (6,8%) y el Partido de la Costa con 79.179 (6,2%).

Sin descanso. Muy intensas y con muchos kilómetros recorridos han sido las últimas jornadas del candidato a senador nacional Maximiliano Abad. Las ocho secciones electorales de la provincia de Buenos Aires han sido visitadas por el dirigente radical acompañando a Patricia Bullrich y a Néstor Grindetti y el viernes último, por la noche, se lo vio en el cierre de campaña de Balcarce apoyando la reelección de Esteban Reino como intendente ante una impactante concurrencia, junto al senador Ariel Martínez Bordaisco y el precandidato a diputado provincial Diego R. Garciarena. Abad viajó a la vecina localidad serrana luego de compartir con Patricia Bullrich y demás candidatos de la lista tras el acto realizado en Mar del Plata, más precisamente en la Plaza del Agua.

Mucho optimismo generó entre los presentes el éxito del mitin no sólo por la cantidad de asistentes sino por el entusiasmo de la gente, en una campaña que resultó bastante apática. “Estoy convencido que Patricia es la dirigente que reúne la fortaleza, la capacidad, el liderazgo y el coraje que la Argentina necesita para salir del atraso y la decadencia y colocarse en el camino del progreso, el desarrollo y la modernidad” expresó en su discurso el máximo referente del radicalismo en nuestra provincia. Fue muy contundente también el respaldo que el radical mendocino Ernesto Sanz, cofundador de la coalición Cambiemos allá por el 2015, brindó a la precandidata presidencial. El próximo domingo, el precandidato a senador nacional emitirá su voto en esta ciudad y partirá rumbo a la Capital Federal para esperar los resultados junto a Patricia Bullrich. Si el actual presidente del Bloque de Diputados de Juntos en la legislatura provincial consigue imponerse en las PASO podría devolverle al radicalismo de la provincia de Buenos Aires una banca en el Senado de la Nación, lugar que el centenario Partido no consigue desde el 2001 cuando, nada menos que Raúl Alfonsín, logró acceder a la cámara alta.