Los viajes de Florence Dixie por la Patagonia y Sudáfrica a fines del siglo XIX son el objeto de estudio del nuevo libro publicado por Eudem, editorial de la Universidad Nacional de Mar del Plata. “A través de Florence Dixie. Una historia de viajes, contactos y transformaciones entre la Patagonia y Sudáfrica”, de Sasha Quindimil, es su título, que se encuentra disponible en formato digital y es de acceso abierto.

Florence Dixie (1855-1905) fue escritora, exploradora, jugadora de fútbol femenino y corresponsal de guerra en Sudáfrica.

En el nuevo libro de Eudem se la presenta atónita junto a una fogata encendida en 1879 en el extremo austral del continente americano. Allí Lady Florence Dixie intenta descifrar el silencio de la mujer aonikenk que ha llegado a su campamento. Dos años más tarde, cerca de Ciudad del Cabo, la misma dama escocesa, enviada como corresponsal de guerra, entrevista al rey cautivo de los zulúes y promete defenderlo.

¿Cómo impacta en la construcción de la subjetividad política de una viajera victoriana el contacto con personas consideradas “otros” de la Patagonia y Sudáfrica, en distintos momentos de su vida, a finales del siglo XIX? ¿De qué manera y en qué medida influyen en la forma en la que se percibe a sí misma, y en qué entiende su relación con los demás, incluyendo su rol y prácticas políticas dentro de la sociedad británica? ¿Qué problemas y significados específicos de las relaciones de género, clase y raza dependientes del contexto histórico, pueden ser iluminados a través del estudio de sus experiencias?

Estas son algunas de las preguntas que aborda este libro a través de los relatos de viajes, cartas, textos ficcionales, informes y discursos producidos por la aristócrata viajera, atleta y escritora sufragista Lady Florence Dixie, entre la década de 1880 y la década de 1890.

Con perspectiva de género, la historia se detiene en cómo unos viajes al sur del mundo llevaron a una mujer británica a transformar su mirada, a disputar la forma del imperio y elaborar propuestas para “mejorarlo”.