El presidente de Francia, Emmanuel Macron, instó hoy a Israel a que “aclare su objetivo” porque advirtió que “la destrucción total” del movimiento islamista palestino Hamas, meta que se puso el Gobierno israelí tras el recrudecimiento del conflicto a inicios de octubre, implicaría “diez años de guerra”.

“La destrucción total de Hamas. ¿Qué es eso? ¿Alguien cree que eso es posible? Si es así, la guerra durará diez años y no creo que nadie sepa definir seriamente este objetivo. Así que hay que aclarar este objetivo”, en comentarios reproducidos por el canal de noticias francés BFM TV, según replicó la agencia de noticias Europa Press.

“La respuesta correcta contra un grupo terrorista no es eliminar un territorio entero o bombardear la totalidad de las capacidades civiles”, argumentó el mandatario francés desde Dubai, donde asiste a la Conferencia de las Partes (COP28) sobre cambio climático que auspicia la ONU.

“Reconocemos el derecho de Israel a defenderse, pero dentro del marco del derecho internacional y el respeto del derecho humanitario”, resaltó, remarcó que hay “demasiadas bajas civiles” y advirtió que “este derecho a defenderse no puede ser en ningún caso un derecho a atacar a la población civil”.

En esa línea, Macron defendió el “derecho legítimo del pueblo palestino a tener un Estado” en favor de la “seguridad a largo plazo” de ambas partes.

También se refirió a la liberación de las personas secuestradas por el movimiento islamista palestino Hamas, al sostener que serían necesarios “varios días de trabajo” y mencionó “una negociación en curso que continúa”.

Macron tiene previsto cenar en Qatar con el emir qatarí, el jeque Tamim ben Hamad al Zani.

Qatar se encuentra en el centro de las negociaciones para una posible reanudación de la tregua, que finalizó ayer tras siete días de pausa humanitaria, y la liberación de rehenes.

El dirigente francés pidió “redoblar los esfuerzos para lograr un alto el fuego duradero”, “conseguir la liberación de todos los rehenes todavía retenidos por Hamas” y llevar a la población gazatí la ayuda humanitaria que “indudablemente necesita”.

Este recrudecimiento de las hostilidades entre Israel y Hamas comenzó el 7 de octubre, cuando milicianos del movimiento islamista palestino irrumpieron en territorio israelí, en un ataque sorpresa que dejó más de 1.200 muertos, en su mayoría civiles, y 240 secuestrados, entre ellas una veintena de argentinos.

En respuesta, Israel prometió eliminar a Hamas y desató una campaña de ataques aéreos y terrestres en Gaza que, según el gobierno del enclave, dejó más de 15.000 muertos, en su mayoría civiles.

El cese temporal de hostilidades de una semana permitió intercambiar rehenes por presos palestinos: 110 secuestrados fueron liberados desde el inicio del conflicto, 105 de ellos durante la tregua, en su mayoría mujeres y menores israelíes, y una decena de ellos argentinos, y a cambio Israel excarceló a 240 personas.