Star+ presentó “Los protectores”, la nueva comedia del sello Star Original Productions que estrenó en exclusiva con todos los episodios de la primera temporada el 9 de marzo en el servicio de streaming.

La esperada serie de comedia “Los protectores”, protagonizada por Adrián Suar, Andrés Parra y Gustavo Bermúdez, sigue las divertidas andanzas y los insólitos enredos de tres representantes de jugadores de fútbol muy diferentes entre sí que deben asociarse para salvar sus respectivos negocios.

En la historia, “Mago” (Suar), “Colombia” (Parra) y “Conde” (Bermúdez) crean “Los protectores S.A.”, una novedosa agencia de representación que tiene como misión velar por el bienestar de sus jugadores las 24 horas del día, apoyándolos en aspectos deportivos, legales, emocionales, amorosos y más.

En este nuevo proyecto, el trío vive las situaciones más inesperadas e insólitas en su trabajo como representantes, y protectores, en pos de proteger y salvar a sus jugadores de las más disímiles situaciones, al tiempo que deben hacer funcionar un negocio a cargo de tres socios cuyas personalidades y estilos de vida no podrían ser más distintos. Estos son los tres protectores que están llegando a Star+.

Mago es el gestor y el motor de “Los protectores S.A.”. Como él mismo lo señala en la historia, la singular agencia que quiere crear junto a “Conde” y “Colombia” es producto de una idea que viene tomando forma en su mente desde hace años. Él cree que los representantes deben ser mucho más que meros negociadores de los futbolistas ante los clubes, y eso por eso que ve en la nueva agencia un proyecto pionero y disruptivo. El optimismo todoterreno de Mago es clave al momento de fundar “Los protectores S.A.” porque no todo fluye de maravillas al crear la agencia.

Hijo de un afamado representante futbolístico, Mago es ocurrente, inquieto y muy pícaro. Cuando la situación lo requiere, miente con facilidad en pos de conseguir lo que busca, pero al mismo tiempo es muy honesto, querible y leal. Ha sido el mejor amigo y socio de Conde durante años, ya que sus padres también eran socios.

Reynaldo es la segunda pata del trípode de “Los protectores S.A.”. Nacido y criado en Bogotá, Colombia, e hijo de un representante de fútbol al igual que Mago y Conde, cuenta con una respetable cartera de futbolistas bajo su representación. Entre ellos se encuentra Marcio Pérez, un joven jugador en ascenso que vive en Italia y tiene un futuro prometedor. ¿El problema? Pese a estar atado por un contrato, Marcio ya no quiere que Reynaldo sea su representante. La situación estresa enormemente al colombiano, hasta que la luz al final del túnel aparece en Buenos Aires, donde su camino se cruza con los de Mago y Conde. Allí, sin embargo, surge otro problema: Mago, Conde y Reynaldo están enfrentados por una rivalidad histórica heredada de sus padres, protagonistas de un episodio conflictivo del pasado. Y, para colmo de males, Reynaldo enfrenta otra crisis en casa, donde presencia una escena poco feliz que involucra a su esposa.

Ansioso y acelerado, Reynaldo no tiene filtro al hablar y tiene un accionar torpe ante las situaciones que lo descolocan. Su personalidad, sumada a los conflictos paternos del pasado, hacen que la relación obligada que debe entablar con Mago y Conde sea poco armoniosa.

“Los protectores S.A.” se completa con Carlos “Conde” Mendizábal. Galán de galanes, Conde reparte su tiempo entre sus responsabilidades como representante y la atención que debe dedicarle a sus múltiples ex parejas. El amor es su punto más débil. Su encanto irresistible es una herramienta muy útil a la hora de lidiar con distintas situaciones que se le presentan junto a Mago, pero también puede meterlo en problemas.

Criado bajo una educación conservadora, plena de valores, Conde es un hombre de carácter racional, medita cada paso que da, es un buscador incesante de seguridad. Las diferencias de personalidad entre Mago y Conde muchas veces conducen a discusiones y peleas, pero la dupla comparte un vínculo profundo de gran lealtad. Ese lazo, sin embargo, se verá puesto a prueba con la llegada de Reynaldo. A diferencia de Mago, Conde es más reacio a asociarse con el colombiano porque insiste en hacerle honor a la rivalidad que había entre los padres, pero reconoce que en la figura de Marcio Pérez hay una oportunidad imposible de rechazar.