Tal y como estaba previsto, con un Baile de Orquestas marplatenses, finalizó ayer el VII Festival Mar del Plata Jazz. Según sus organizadores, durante estos cinco días de actividad, más de 13 mil personas disfrutaron de los conciertos, recitales, talleres y jam programadas para esta edición.

Las actuaciones de La Modesta Orquesta Típica, la Orquesta de Jazz ICM y la Orquesta Cumbia Grande, en un original, multitudinario y divertido “Baile” marcaron un divertido final.

Las actividades se caracterizaron por estar atravesadas por el jazz, pero combinándose con otros géneros y estilos, como el caso de La Cumbia Grande, que tiene arreglos originales escritos especialmente.

Antes, la fusión del jazz se dio con la actuación de formaciones del género junto a la Orquesta Sinfónica Municipal. Gracias a la colaboración de la Municipalidad, se contó con la posibilidad de este ensamble y, además, de la utilización del espacio del Teatro Colón, una sala que le da gran prestigio al movimiento jazzero.

“La verdad es que estamos muy contentos porque, una vez más, el Festival superó nuestras expectativas. No sólo porque convocó a más gente que en otras ediciones, sino porque todas las fechas en el Teatro Colón estuvieron colmadas y el resto de las sedes también funcionaron muy bien. Creemos, cada vez con más seguridad, que el Festival se ganó un espacio entre los marplatenses, porque la recepción es muy buena”, analizó Nicolás Pasetti, integrante de Improvisación Colectiva en Mar del Plata, la ONG que desde hace siete años organiza un evento que congrega en la ciudad a los mejores exponentes del jazz.

En esta línea, valoraron la devolución de los músicos internacionales y de otros puntos del país, que en todos los casos -según contaron- “agradecieron la invitación y también reconocieron la impronta del Festival” como espacio de intercambio entre músicos.

Por último, desde ICM destacaron el trabajo en equipo de decenas de personas que, año tras año, posibilita la realización del Festival con más de 30 grupos en escena, siete sedes, un escenario al aire libre en Plaza Mitre y la llegada a la ciudad de los artistas más renombrados del género.

“Despedimos esta VII edición con la alegría de haber vuelto a ofrecerle al público marplatense y turista, que respondió masivamente, una propuesta musical diferente. El balance es muy positivo y nos obliga, afortunadamente, a trabajar y pensar en la octava edición”, completó el contrabajista.