Hoy alejados de la conducción más dura de PRO, el grupo -una de las patas peronistas del partido- se refugia bajo el ala del jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, que ve con buenos ojos su propuesta de hacer un armado más amplio al de Juntos por el Cambio, y sumar adhesiones peronistas que no integran el Frente de Todos.

“Massot desembarcó en Tigre y se sumó a trabajar en el armada de Juntos por el Cambio ahí”, confirmaron a Télam fuentes del grupo.

La movida de Massot debe leerse en sintonía con los planes de Monzó, que el mes último celebró -en un encuentro virtual- un año de su regreso político a suelo bonaerense, y ya planifica una gira para recorrer el territorio distrito por distrito.

Sobre las intenciones de Massot, él mismo las dejó claras en el primer Zoom que mantuvo con vecinos días atrás, y en sus declaraciones a los medios locales. “Obviamente que me encantaría ser intendente y considero que puedo tener algunos atributos para presentar una oferta local, pero que quede muy claro que el objetivo no es ese”, explicó.

Massot vive hace dos años en Don Torcuato, en el partido de Tigre, y por eso busca “involucrarse más en los problemas del municipio”, pero su lectura es más política que vecinal.

Su mirada es que “la oposición empieza a atomizarse”, por un lado por los liberales -que conforman diferentes alternativas de cara a las elecciones de 2021- y, por el otro, por el sector peronista que conduce Roberto Lavagna, más los que pudieran surgir de acá hasta los comicios.

Por eso, propone “construir de abajo hacia arriba” un frente en Tigre que agrupe a todos y no se divida por los vaivenes que habrá en las candidaturas nacionales.

“Una alianza que nazca en el Municipio que pueda ser más grande que los partidos de Juntos por el Cambio”, según lo definió, y, mientras, sigue con su recorrido de la mano de su jefe político, planifica encuentros vía Zoom con vecinos para contar su propuesta.