El secretario general del partido español Vox, Javier Ortega Smith, dijo  en Buenos Aires que Argentina debe construir una alternativa “generacional” a la izquierda radical para defender los valores de la libertad y la patria.

“Les propongo, como hemos propuesto a nuestros compatriotas en España, que busquen una alternativa, pero no una alternativa electoral a corto plazo, sino generacional”, dijo Ortega Smith, también portavoz de Vox en el Ayuntamiento de Madrid.

En una conferencia organizada por el Centro de Estudios Legales sobre el Terrorismo y sus Víctimas (Celtyv) de Argentina, Ortega Smith abogó por hacer la “resistencia frente a la imposición totalitaria” y “la reconquista de los valores perdidos”.

El dirigente de Vox dijo que muchos en Argentina, donde en octubre se celebrarán elecciones presidenciales, “están preocupados pensando si volverá otra vez el populismo de la izquierda radical”.

“Pensarán que solo existe una alternativa y cada cual es muy libre de buscar la alternativa política que crea mejor. Yo no voy a entrar en esa consideración de si es buena o mala la alternativa ante frente al populismo de izquierda. Solo digo de que estoy convencido de que la fórmula que va a triunfar, la única posible, es aquella que tenga la valentía de llamar a las cosas por su nombre”, dijo.

Cuestionó la “debilidad de ese discurso fácil que quiere contentar a todos, que tiene miedo a enfrentarse a esa izquierda totalitaria”.

El secretario general de Vox llamó a no tener “miedo”, a “llamar a las cosas por su nombre” y “hablar de lo obvio y lo normal: la patria, la libertad, la familia, la educación y el progreso”.

En la charla, realizada en el Palacio Paz, sede del Círculo Militar, Ortega Smith, que se definió como español pero también argentino porque su madre es de este origen, hizo un repaso por la historia de la construcción de Vox y los valores que defiende su partido.

El dirigente estuvo acompañado en la conferencia por la abogada argentina Victoria Villarruel, fundadora y presidenta del Celtyv.

Esta organización no gubernamental sostiene que las víctimas de la violencia armada desplegada por organizaciones guerrilleras en el período previo a la última dictadura militar, durante ese régimen de facto que gobernó Argentina entre 1976 y 1983 y en el gobierno democrático de Raúl Alfonsín (1983-1989) no han tenido “justicia, verdad, reparación y paz”.