Eduardo Gatto, el hombre que desde principios del año pasado estaba detenido por el aberrante crimen de su ex pareja Miriam Flurin, fue absuelto esta tarde por un Tribuanl que criticó la labor fiscal y aseguró que no había pruebas para condenarlo.

El hecho causó conmoción en la ciudad y se descubrió el 17 de febrero de 2015 cuando un vecino de la zona de El Sosiego encontró el cuerpo de Flurin entre unos arbustos. Cuatro días antes Flurin había desaparecido y unos testigos habían aportado datos sobre la presencia de ambos, el 13 de febrero, en la vivienda del hombre, en Bahía Blanca al 600.

El caso lo tomó el fiscal Eduardo Amavet y durante la investigación se agregaron elementos incriminatorios hasta que fueron suficientes para que la Justicia solicitará la captura de Gatto. Finalmente, el 5 de marzo fue detenido en Tandil, hacia donde había huido una vez que supo que era investigado.

Esta tarde el juicio inicido a principios de este mes llegó al final con la sentencia absolutoria de los jueces Juan Manuel Sueyro, Eduardo Alemano y Fabián Riquert, quienes además criticaron duramente la labor de los fiscales. Vale recordar que Amavet a mitad de este año dejó la causa por rotar las fiscalías con Juan Pablo Lódola. Ambos fueron cuestionados por los jueces al considerar que existió una “deficiente actividad investigativa que impide saber si (Gatto) fue el autor del hecho”.

Entre los reproches están la falta de profundización de otras líneas investigativas que mencionaban a un hombre, el análisis escaso de líneas telefónicas y la omisión de medidas de pruebas claves.

Los jueces no desconocieron el historial de violencia de género entre Gatto y Flurín, una pareja que funcionó en algún momento y que tuvo 3 hijos. Flurín luego tuvo con otros hombres dos hijos más.

Incluso en el fallo de esta tarde se dejó ver que “probablemente” Gatto sea el asesino pero que en un estado de derecho lo que prima son las pruebas, y éstas no estaban presentes en la investigación.

La decisión del Tribunal causó indignación en los familiares de la víctima, que, sin embargo, atacaron a los fiscales Amavet y Lódola. Según publicó el sitio QuéDigital, la cuñada de Flurin estalló tras conocerse el veredicto: “Lo único que queríamos era justicia, este hijo de mil puta salió libre; fue él, ella se bancó años de maltrato, él la hacía prostituir, la perseguía, le desarmaba los hogares”.