El seleccionado de fútbol de Portugal volverá a encomendarse este miércoles a la calidad y potencia goleadora de su máxima figura y capitán, Cristiano Ronaldo, para enfrentar a Marruecos, que necesita sumar su primera victoria, en un partido correspondiente a la segunda fecha del Grupo B del Mundial de Rusia 2018 de fútbol.

El encuentro se jugará en el estadio Luzhniki, de Moscú, desde las 9 de nuestro país, con el estadounidense Mark Geiger como árbitro y televisación de TyC Sports y DirecTV.

Portugal, que logró rescatar un empate 3-3 ante España, con un “hat-trick” de Cristiano, necesita un triunfo y, si es posible, por muchos goles de diferencia, en tanto que Marruecos, que perdió por 1-0 ante Irán, con un gol en contra en el quinto minuto adicionado, no puede dejar escapar puntos si sueña con pasar a los octavos de final.

La brillante actuación del astro portugués en el debut, merced a su eficacia goleadora, la cual desató una vez más los elogios del mundo del fútbol, que tiene sus ojos sobre la Copa del Mundo, logró salvar las ropas para los portugueses.

El delantero del Real Madrid sacó a relucir todo su repertorio en la noche de Sochi y salvó de un auténtico disgusto a los campeones de Europa, que habían desperdiciado estar dos veces en ventaja y, con un agónico tanto de tiro libre, sellar el triplete personal y frustrar a España.

En el encuentro de este miércoles, en Luzhniki, donde hace una década ganó la Liga de Campeones con el Manchester United, CR7 será pieza vital, ya que es el líder, fuera y dentro del campo.

Fernando Santos, entrenador de los lusos, debe hallar la vuelta para que su equipo no tenga ‘Cristianodependencia’, ya que dispone de futbolistas de destacado rendimiento en Europa.

A diferencia del primer partido, donde España manejó el balón, en ésta oportunidad será Portugal que que deba tomar la iniciativa y proponer el ataque ante un rival que teóricamente se pertrechará atrás para buscar la velocidad de sus delanteros.

Santos, quien no quedó conforme con el rendimiento de Goncalo Guedes, le dará lugar en el once titular a André Silva, delantero del Milán.

Marruecos encara el partido con esa necesidad de puntuar para no quedar eliminado y con la baja de una de sus principales figuras, el mediocampista Noureddin Amrabat, quien sufrió una ligera conmoción cerebral ante Irán.

El entrenador francés Hervé Renard cambiará la estrategia, ya que probó con una línea de cinco, con dos centrales bien posicionados, apoyados por un pivote de corte defensivo, que tendrá a su costado dos laterales que deberán hacer todo el recorrido y sorprender sumandose al ataque.