LA PLATA (Corresponsalía). – La Dirección Provincial de Personas Desaparecidas del Ministerio de Seguridad bonaerense presentó la campaña “Yo soy”, que apunta a generar conciencia sobre la importancia de la identidad de origen, la adopción y la apropiación de bebés, niños y niñas.

De acuerdo a datos oficiales, el 85% de las personas que se acercaron a la Dirección con dudas sobre su identidad entre 2005 y 2015 fueron apropiadas; esto es, inscriptas bajo una falsa filiación, lo cual constituye un delito.

La campaña que cuenta con el apoyo del Ministerio de Comunicación Pública bonaerense consta de 9 cortometrajes disponibles en www.mseg.gba.gov.ar/yosoy que tratan la temática de la adopción, la apropiación, el abandono y el mito del instinto maternal, entre otros.

Estos materiales están protagonizados por la psicóloga feminista Eva Giberti, el médico pediatra Pablo Croce, gente que busca conocer su origen o madres que buscan a sus hijos e hijas.

El director de Personas Desaparecidas, Alejandro Incháurregui, detalló que “el 85%” de los consultantes “son ciudadanos y ciudadanas de la provincia de Buenos Aires que buscan conocer a su madre, sus hermanos o su padre”.

“Un porcentaje muy menor -un 3%- son madres que buscan a sus hijos que no pudieron maternar o criar”, agregó en una entrevista con Radio Provincia.

Sólo un 15% fueron adoptados

Conocer la identidad de origen es un derecho consagrado en el artículo 12 de la Constitución provincial.

Sólo entre 2005 y 2015, la Dirección recibió unas 3 mil consultas, de las cuales se resolvieron mil.

Según las estadísticas de ese organismo, el 85% de las personas que se acercaron fueron apropiadas, o sea, inscriptas bajo una falsa filiación, en tanto que sólo el 15% fueron adoptadas.

Desde la Dirección de Personas Desaparecidas se aseguró en un comunicado que “aunque la palabra ‘apropiación’ remita hoy casi exclusivamente al período de la última dictadura militar, lo cierto es que la compraventa, entrega, robo, sustracción de identidad y falsificación de documentación existieron a lo largo de toda nuestra historia y fueron legitimados en distintos grados”.

“Siempre las víctimas eran personas socialmente vulnerables”, se destacó.

No hay un derecho a ser padres

Para Incháurregui, “es verdad que siempre gente con mayor poder adquisitivo o con mayor nivel socio-ecónomico se apropia de los niños de los pobres”.

“Y además está la falsa creencia de que hay un derecho a ser padres, y no hay un derecho a ser padres”, señaló el funcionario y antropólogo.

Y concluyó que “el Estado no tiene la obligación de darle un niño a un matrimonio pretenso adoptante”.

Si tenés dudas: 0800 333 5502