CERRAR

La Capital - Logo

× El País El Mundo La Zona Cultura Tecnología Gastronomía Salud Interés General La Ciudad Deportes Arte y Espectáculos Policiales Cartelera Fotos de Familia Clasificados Fúnebres
Opinión 5 de febrero de 2019

Prevenir la violencia de género

por César Ventimiglia

Un femicidio cada menos de 48 horas: durante enero de este año sumaron 21, uno de los cuales ocurrió en nuestra ciudad. Según las estadísticas, en el 90% de los casos son cometidos por personas del círculo íntimo de la víctima.

Cuando la población teme y se siente insegura, en las viviendas se mejoran las defensas, se colocan alarmas y se refuerzan los accesos, suponiendo que la agresión viene de afuera. Sin embargo, a diario comprobamos que es más probable que una mujer sea agredida por su pareja en su casa, que por un desconocido en la calle.

¿Son prevenibles los femicidios?

Mientras esperamos que se hagan efectivos los postulados de la ley 26.485 de Protección Integral a la Mujer y la Ley Micaela de Capacitación y Sensibilización de los funcionarios públicos, ¿son prevenibles los casos que, con frecuencia preocupante, suelen terminar en femicidio? Terminantemente, sí. Son prevenibles mediante decisiones políticas inmediatas y eficaces, refuerzos institucionales adecuados y dispositivos tecnológicos idóneos. La mujer amenazada debe sentirse protegida permanentemente, acompañada de su comunidad, segura institucionalmente.

En primer lugar, es necesario que exista la decisión política, no sólo expresada discursivamente, sino aquella que se traduce en la afectación de los recursos humanos y económicos imprescindibles para que el relato (ficticio) se transforme en una política concreta (real). Es decir, no alcanza con que los responsables políticos se muestren apenados cuando ocurre un femicidio, es menester se comprometan a evitarlo. Las acciones de la mayoría de los políticos muestran perplejidad, ausencia de compromiso, falta de altura en el trato del problema. Llegan tarde.

En segundo lugar, es necesaria la intervención multiagencial inmediata, con adecuada coordinación y comunicación entre los diferentes poderes del Estado que tienen incumbencia en el tema. Intervención sin demoras ni trabas burocráticas, en áreas como salud, justicia, policía y todas las del denominado gabinete social. Conjurar y prevenir la violencia de género desarrollando una práctica y una cultura de seguridad y de derechos efectivos.

La intervención, además de ser inmediata, debe ser eficaz. No alcanza con una orden judicial que determine restricción de acercamiento, si no podemos asegurar su efectivo acatamiento. La resolución de un magistrado cuyo cumplimiento no se puede garantizar, finalmente puede tener el efecto “post facto” no deseado de transformar el delito de amenaza -en expectativa- en otro -consumado- de homicidio.

En consecuencia, las políticas de seguridad deben expresarse en su carácter preventivo, actuar antes, porque una vez consumado el delito, solo queda –en el mejor de los casos- el castigo penal a su autor. La condena penal no le devuelve la vida a la víctima y muestra el fracaso y la falta de la prevención oportuna.

Agenda inmediata contra el femicidio

Estimamos urgente: a) reforzar la operatoria de la Unidad Temática de Violencia de Género, de la Policía Local y b) distribuir el Dispositivo dual (botón anti pánico relacionado con tobillera), conectado a la red de seguridad.

a) Unidad Temática de Violencia de Género, de la Policía Local. A esta unidad policial específica pensada para la protección de víctimas de violencia de género, es necesario garantizarle recursos humanos y materiales para el cumplimiento de su misión, que es: visitar periódicamente a las víctimas poseedoras del botón antipánico entregados por orden judicial, revisar el buen estado de funcionamiento y la carga de la batería de los mismos, establecer contacto permanente con las víctimas, ponerse a disposición y brindarles, en suma, apoyo y contención. Lamentablemente, la Municipalidad ha reducido la estructura de la Dirección de la Mujer, no entrega dispositivos antipánico por falta de presupuesto y las víctimas de violencia de género están en lista de espera para conseguirlos. Indigna que estemos hablando de seres humanos que no pueden ejercer su derecho básico de vivir libremente. ¿Se entiende porqué planteamos la necesidad de una decisión política?

b) Dispositivo dual (botón anti pánico conectado a tobillera electrónica). El botón antipánico, si bien protege a la mujer, tiene limitaciones por su propia tecnología: lo acciona la víctima cuando ya hay contacto visual o una amenaza de aproximación inminente del agresor, por lo tanto aun cuando la respuesta policial sea rápida, puede parecer eterna para la víctima, y a veces llegar tarde. Los avances tecnológicos permiten ahora, conectar el dispositivo antipánico a una tobillera electrónica colocada en la pierna del agresor, dicho aparato “dialoga” con el botón y cuando se acerca a una distancia determinada, se disparan llamadas de emergencia al 911, al teléfono de la mujer, al centro de monitoreo y a distintos números incorporados, activando un protocolo que facilita la rápida actuación policial en resguardo de la mujer amenazada. La gran diferencia es que este mecanismo geoposiciona al agresor y la víctima con un rastreador, de manera que permanentemente se puede ubicar a ambos. Es una alternativa superadora del botón antipánico, no sólo por su eficacia preventiva, sino porque libera a la víctima de estar pendiente de la situación.

Estos dispositivos se encuentran en funcionamiento en varias provincias de nuestro país -al ex boxeador “La Mole” Moli se le ha colocado una de estos aparatos, en la Provincia de Córdoba-, no estamos hablando de herramientas muy costosas. El tema económico no puede ser excusa para postergar la toma de decisiones. A modo de ejemplo, podemos mencionar que el Ministerio de Seguridad ha adquirido torres de seguridad (evocan los mangrullos para otear a los indios), seguramente de utilidad, pero muy costosas. Invertir en los dispositivos electrónicos, escenográficamente, no será tan efectista como las torres de seguridad, pero sería una medida eficiente para salvar vidas.

En síntesis: tres pasos concretos para prevenir el femicidio.

a) Decisión política con estrategia multi agencial,

b) Fortalecimiento de la Unidad Temática de Violencia de Género y

c) Conexión a la red tecnológica de prevención.

Que se oiga el riesgo para aviso de los centinelas.

(*): Presidente de Acción Ciudadana | Asociación Civil.



Lo más visto hoy