“Esa mentira simple de que Macri benefició al campo hay que desmenuzarla”, expresó el ex presidente de la Federación Agraria Argentina, Eduardo Buzzi, en declaraciones a una radio de Mar del Mar del Plata.

Buzzi, ahora asesor de Eduardo Monzó, presidente de la Cámara de Diputados de la Nación y figura prominente de Cambiemos, señaló que “Macri benefició a una parte del campo pero hay deuda aún con otra gran parte del mismo sector, especialmente con los productores chicos”.

En diálogo con la periodista Noelia Sosa, de Continental Mar del Plata, el dirigente que fuera gran protagonista del conflicto entre gobierno y campo en 2008 advirtió que hay distintas realidades: “en el sector agroexportador de maíz, trigo, y soja todavía existe una mirada positiva sobre esta etapa. Ahora se puede exportar trigo. Ustedes ahí, a pocos kilómetros de Mar del Plata hace dos años veían los bolsones de trigo que no se podían exportar”.

Sin embargo, señaló el productor santafesino, “si le preguntamos a los tamberos, o a los horticultores de Mar del Plata, La Plata, Rosario o Florencio Varela, posiblemente no piensen lo mismo. Porque estos son casos vinculados al mercado interno y en éste se ha perdido aún más capacidad adquisitiva”.

“Quienes cultivan hortaliza o fruta no pueden decir que están en un buen momento, venían mal y siguen mal”, recalcó para señalar que “una de las grandes asignaturas que tiene pendientes el gobierno en este momento es cómo le pone plata en el bolsillo al consumidor”,

“Algo juega a favor de esta etapa –añadió– y decir ésto no me convierte en macrista militante: hoy existe la posibilidad de dialogar, de negociar, de buscar soluciones entre todos y ésto no existió por muchos años, porque nos habían catalogado como el enemigo número uno del gobierno K, y así el sector agropecuario en su conjunto no tenía ni siquiera la posibilidad de reunirse con un ministro”.

Finalmente, consultado sobre la visita de la ex presidenta y ahora candidata a senadora nacional Cristina Kirchner a un tambo de Lincoln, Buzzi subrayó: “no, no…éso cayó muy mal. Esto de Cristina visitando un tambo es verdaderamente una hipocresía, porque durante la época kirchnerista cerraron infinidad de tambos y sufrieron mucho las ciudades intermedias vinculadas a la ruralidad. A esa gente no se la puede engañar”.