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Policiales 31 de octubre de 2020

Robó una residencia de ancianos y lo reconocieron por ser “muy bizco”

Gastón Segovia fue condenado a tres años y cuatro meses de prisión por el Tribunal Oral en lo Criminal N° 3 por haber asaltado a mano armada un geriátrico s en octubre del año pasado. Fue reconocido por la víctima gracias a una foto en Facebook que evidenciaba su problema de visión.

El ladrón era muy bizco“, había explicado la empleada del geriátrico “La Tranquilidad” a los policías que le pedían algún detalle de los tres delincuentes que, a punta de pistola, ese 13 de octubre habían asaltado el lugar y llevado 60.000 pesos. Con esa descripción, la víctima lo pudo identificar gracias a una foto de Facebook y con esa información la policía finalmente lo detuvo al delincuente que era “muy bizco”

Gastón Segovia fue detenido el 21 de noviembre de 2019, acusado por ese robo al hogar de ancianos. Sobre él ya pesaban otras condenas por robos, que habían sido unificadas a once años de prisión.

En un juicio abreviado realizado en el Tribunal Oral en lo Criminal N° 3, el fiscal Fernando Berlingeri y la defensa de Segovia acordaron una pena de tres años y cuatro meses, que vencerá el 20 de marzo de 2023, por ser culpable del delito de “robo agravado por su comisión en poblado y banda y el uso de arma cuyo aptitud para el disparo no pudo ser demostrada“.

Segovia manejaba información precisa del hogar “La Tranquilidad”. Sabía el nombre de un anciano que era nuevo en el geriátrico y que ese jueves 17 de octubre de 2019 habría dinero en el lugar. Seguramente también conocía que las tres cámaras de seguridad del geriátrico no funcionaban hace tiempo y que solo servían para “espantar” a posibles ladrones. Pero no a él y sus cómplices. Segovia tenía información gracias a que era amigo de una de las empleadas del lugar y en charlas casuales, sin saberlo, le había contado todo sobre su trabajo y lo necesario para que el ladrón planificara su golpe.

El 13 de octubre de 2019, cerca de las 19, Segovia y otras dos personas ingresaron al geriátrico “La Tranquilidad“, ubicado en Alice al 7100 y preguntaron por un anciano que residía en el lugar y había ingresado recientemente. La empleada, que no conocía a los familiares del anciano se descuidó, los recibió y de un momento a otro tenía a los tres hombres encima, que le apuntaban con un arma de fuego y le exigían dinero. La víctima no tuvo más opción que entregarles todo el efectivo que había en el lugar, unos 60.000 pesos, para que se fueran sin lastimarla.

Una vez que el asalto terminó y la víctima salió de su estado de shock, pudo describir físicamente a los delincuentes y le dijo a la policía que uno era “muy bizco”. Una compañera de trabajo que escuchó la declaración le mostró con su celular una foto de Segovia, directamente del Facebook del hombre en la que se veía el problema que padecía en sus ojos y la víctima no dudo: ese era uno de los hombres que acababan de asaltarla.

El fiscal Berlingeri y la policía orientaron la investigación desde un primer momento a dar con Segovia, ya que todas las pruebas apuntaban a él y no había lugar a una hipótesis alternativa. Finalmente el 21 de noviembre el delincuente que era “muy bizco” fue detenido por la policía.

Durante el juicio, el fiscal Berlingeri planteó como agravantes que el lugar escogido por los delincuentes, un geriátrico al que le quitaron el dinero que las familias de los ancianos aportaban para la manutención de los residentes. “El noble fin de ese lugar y del dinero sustraído repercuten en el disvalor de la conducta”, consideró el fiscal.

Finalmente, el juez Juan Manuel Sueyro adhirió al agravante planteado por el fiscal y también declaró a Segovia como “reincidente” ya que el 14 de mayo de 2017 el Tribunal Oral N° 2 lo había condenado a una pena de tres años y seis meses de prisión y, por ya ser reincidente, se le dictó una pena única de once años, que vencía el 11 de julio de 2019.