El taxista detenido acusado de haber asesinado el viernes de ocho puñaladas a Alejandro Torres (54) en un kiosco ubicado en la zona de Tribunales se negó a declarar y continuará alojado en la Unidad Penal 44 de Batán.

Este sábado, cerca de las 9 de la mañana Amadeo Eduardo Fernández (46) ingresó al edificio de Tribunales ubicado a unos 100 metros del “Polirrubro Millie” -Tucumán 2406- donde tan sólo 24 horas antes, Torres había sido asesinado.

Fernández estuvo reunido con una abogada durante unas dos horas y, minutos pasados las 12.30 se entrevistó con el fiscal Fernando Castro, para su declaración indagatoria.

Por consejo de su abogada defensora, Fernández se negó a ofrecer su testimonio al fiscal, quien mantuvo la imputación por “homicidio” en su contra, por lo que el taxista será trasladado nuevamente a la Unidad Penal 44 de Batán, donde continuará detenida mientras avanza la investigación.

Alejando Torres fue asesinado de ocho puñaladas el viernes, cerca de las 8.30, en el interior de su kiosco de Tucumán 2406. El cuerpo fue encontrado por un mozo que le llevaba un café y que vio como un hombre subía a un taxi para darse a la fuga y una mujer salía del kiosco y se iba caminando en otra dirección.

La principal hipótesis de los investigadores, es que Fernández es el hombre que subió al taxi y que el ataque se dio en un contexto vinculado conque él es la actual pareja de la exnovia de la víctima.

De todas maneras, y a pesar de que el mozo declaró que vio salir a un hombre y a una mujer de la escena del crimen, el fiscal Fernando Castro explicó a LA CAPITAL que no están buscando a ninguna mujer por el crimen y que, por el momento, la investigación gira en torno a Fernández.