La proyección de exportaciones del agro cae por debajo de los US$30.000 millones
Al panorama de menor producción se le suma la caída en los precios internacionales de los principales productos de exportación del agro argentino.
Al panorama de menor producción se le suma la caída en los precios internacionales de los principales productos de exportación del agro argentino.
Hay una reducción significativa en las expectativas de cosecha y así el potencial de soja de primera registró pérdidas de entre 20% y 30% en los cultivos de la zona núcleo.
El golpe de calor en período crítico afecta el rendimiento aún con buen estado hídrico en los suelos. Los cultivos de segunda, o sea los que se sembraron en diciembre, están una situación muy vulnerable.
La soja de primera se encuentra en un "momento crítico" en su proceso de definición de rendimiento. En tan sólo siete días, el área con condiciones de cultivo de muy buenas a excelentes disminuyó del 90% al 65%.
La venta de granos tendría un salto respecto a 2023 de unos US$ 10.000 millones, año que fue severamente afectado por una de las peores sequías.
Con las abundantes lluvias en las principales zonas productivas y con la posibilidad de que incluso pueda haber incrementos en las estimación de cosecha, la campaña gruesa empieza a tomar mayor color y espesor.
Las precipitaciones que se dieron al principio de la semana en la región central fueron claves no solo para detener el deterioro del trigo, sino también para impulsar la siembra de maíz y de soja.
La oleaginosa alcanzaría una producción de 50 millones de toneladas que, a priori, sería mejor al que atraviesa el trigo y el maíz en estos momentos.
Antes de la quinta edición del Programa de Incremento Exportador, la comercialización del poroto registraba mínimos históricos, con promedios que iban de 25.000 a 50.000 toneladas negociadas de manera diaria.
Se espera que las exportaciones netas para el ciclo 2023-24, a los precios vigentes, deje como saldo un ingreso de divisas de 34.300 millones de dólares.