Con entradas totalmente agotadas meses antes de su llegada, Camilo brindó el primero de sus 5 shows en Buenos Aires ante un público eufórico y emocionado. El viernes 17 de diciembre se despide del país en el Movistar
Arena, en una última oportunidad para verlo.

Por primera vez en Argentina, presentó “Mis Manos Tour” con un espectáculo impactante y acompañado de una invitada muy especial: su esposa Evaluna Montaner.

La figura internacional sorprendió a su público con una emotiva versión de “Canción para mi muerte” de Sui Generis, confesando su profundo fanatismo desde pequeño.

Con una puesta en escena deslumbrante, pantallas imponentes, juego de luces y banda en vivo, el joven colombiano cautivó al público acompañado por sus
excepcionales músicos Oscar Convers; Daniel Uribe; Frank Fuentes y Nicolás González haciendo emocionar y cantar de principio a fin a los miles de espectadores que se hicieron presentes.

Abriendo con su gran hit “Favorito” La noche ya prometía ser una verdadera celebración: Camilo irrumpió en escena con su energía característica y el Luna Park estalló en gritos y aplausos. La euforia inundó el estadio y la química con la gente fue inmediata. Durante más de un hora y media, el público disfrutó de canciones como “Tutu”; “No Te Vayas”; “El Mismo Aire” y “Tattoo” entre otros.

En una noche cargada de alegrías y festejos, Camilo tenía una sorpresa preparada para su Tribu argentina. Con profunda conmoción, en las primeras estrofas de “Machu Picchu” invitó a subir al escenario a su esposa Evaluna. La conexión de la pareja fue magnética y le regalaron al público una tierna versión de “Por Primera Vez”.

“Todas mis canciones son para ella”, aseguró el artista con una sonrisa inmensa.

Las emociones siguieron de la mano del público: Camilo invitó a subir al escenario a una niña de la audiencia para acompañarlo en “Tattoo”. Con dulzura, le dijo que su
sonrisa “brillaba”, haciéndola alegrar hasta las lágrimas.

Luego llegó la esperada “Índigo”, su último gran éxito junto a Evaluna, quien volvió a subir al escenario para interpretar una memorable versión de la canción.

La gran sorpresa llegó casi al final: Camilo le confesó a su gente que desde chico es fan de Sui Generis y que se prometió que si alguna vez tocaba en la Argentina, iba a
tocar un tema de la icónica banda del Rock Nacional. Con guitarra en mano cantó una sentida interpretación de “Canción para Mi Muerte” para el recuerdo. “Esto fue para
el Camilo de 10 años”, expresó.

El broche de oro de una noche memorable lo dió “Vida de Rico”, dejando al público extasiado y feliz de poder haber sido parte de un show con todos los condimentos.