Los reclamos provenientes del barrio Los Acantilados generaron la reacción de las autoridades. Luego de que esta semana la zona fuera “saturada” con la presencia de efectivos policiales, los vecinos se reunieron ayer con jefes de distintas fuerzas de seguridad y funcionarios municipales para exigirles respuestas de fondo y duraderas.

Luego de varias horas de discusión finalmente acordaron crear una mesa de trabajo, que tendrá su primera reunión el próximo 7 de febrero. “La sede estuvo desbordada de gente. Eso demuestra que hay preocupación y que no nos quejamos porque sí”, le explicó a LA CAPITAL la presidenta de la sociedad de fomento, Lorena Medel.

A la reunión realizada este jueves asistieron, entre otros, el jefe de la Policía Departamental, Fabio Astor y el jefe de la Policía Local, Fernando Telpuk.

Ante ellos los vecinos plantearon sus inquietudes y exigieron que la actuación de las fuerzas de seguridad no se limite a aquietar los ánimos cada vez que la gente reacciona indignada frente a hechos de inseguridad que cobran notoriedad.

“Hace dos días que tenemos el barrio lleno de policías cada dos cuadras. Nos parece una tomada de pelo. Es una muestra de que cuando la gente reclama y amenaza con protestar aparecen recursos que en otro momento no están. No queremos esta clase de respuestas exageradas y ocasionales, sino que se trabaje seriamente en la prevención y que haya tranquilidad para las familias”, comentó Medel.

Ante este planteo, los vecinos y las autoridades consensuaron seguir dialogando y crear una mesa de trabajo, que se reunirá por primera vez el próximo 7 de febrero.

“Queremos que ahí estén presentes las áreas de Monoridad, Niñez, Cultura y Educación del municipio porque nos parece que un tema clave es contener para prevenir el delito”, destacó la vecinalista.

Según Medel, hubo quejas por el estado de la infraestructura del barrio, en especial por las luminarias, y reproches a causa del nulo resultado que tuvieron otras reuniones muy similares a la realizada ayer.

“Por eso firmamos un acta en donde todos los compromisos quedaron asentados”, explicó.

Además, dijo que los vecinos realizaron sus aportes para que las autoridades estén al tanto de lo que ocurre en el barrio.

Sol Devesa, una vecina que días atrás sufrió un violento asalto en su vivienda, contó que desde diciembre se produjeron al menos 12 hechos similares en la zona. También se habló de los constantes hurtos que se producen en los domicilios y acerca de la falta de recursos para atender casos de violencia de género.

“Como siempre, en estas situaciones la policía pide colaboración. Las familias tienen miedo y están dispuestas a colaborar, pero también exigen que los responsables cumplan con su trabajo”, sostuvo.