Verónica Borelli no sale de su asombro. Está “shockeada”por la resolución de la Cámara de Casación Penal que le revocó el arresto domiciliario a Federico Sasso, el joven condenado a 6 años por atropellar y matar a su hija, Lucía Bernaola. Y más “shockeada” está porque a menos de 24 horas de ese fallo, Sasso fue detenido y trasladado a la Unidad Penal 44 de Batán.

“Sigo shockeada, es algo porque lo que luché desde que falleció Lucía. Es momento de que Sasso tome conciencia de lo que hizo, ya que para mí él todavía no la tomó y no se siente arrepentido”, dice Borelli y agrega: “Pienso que Lucía es inmensa, ese nombre es inmenso. Es muy importante que la recordemos, la tengamos presente. Desde cualquier lugar que uno lo mire, desde mi lucha, mi pedido de justicia. Esto deja un precedente”.

El lunes por la noche, el abogado Maximiliano Orsini llamó a Borelli para contarle el fallo de la Sala II de la Cámara de Casación Penal, en el que revocaba la prisión domiciliaria de Sasso y lo dejaba a un paso de ir a la cárcel a cumplir la condena. Este martes el Tribunal Oral Criminal N° 1 constató ese fallo y el fiscal Rodolfo Moure ejecutó la orden de detención del joven para trasladarlo a la Unidad Penal 44 de Batán.

“Cuando fue el juicio de Lucía yo tenía dos expectativas: el cambio de carátula y que cuando terminara el juicio y dictaran la sentencia y Sasso fuera trasladado a un penal. Ninguna de las dos sucedió”, recuerda Borelli.

Fue justamente en la Sala II de la Cámara de Casación Penal en La Plata donde la mamá de Lucía Bernaola sintió que Sasso podía terminar en prisión, cuando luego de “colarse” en una audiencia solicitada por el abogado Facundo Capparelli en representación del condenado, la mujer pudo explicarle a los jueces María Florencia Budiño y doctor Fernando Luis María Mancini todo lo que había sucedido, cómo había muerto su hija y la lucha que llevaba desde 2017. “La jueza lloraba a la par mía y cuando salí de esa audiencia sentí que en algún momento Sasso iba a pisar la cárcel. Lo sentí y no me equivoqué”, dice.

“Esto es lo que esperábamos. La cantidad de años no sería algo importante ya. Está condenado a 6 años de prisión y lo que más me interesaba es que cumpliera la pena en un penal, como corresponde. Y pienso que esto es la Justicia. Tardó mucho, tarda y no sé qué puede pasar mañana, puede salir en libertad por un dolor de cabeza, pero hoy celebro”, dice Verónica Borelli.

“Lo que sí puedo decir es que Sasso es trasladado a un penal y aplaudo a Casación. Soy una agradecida de este fallo. Sasso hace 3 años que está en prisión domiciliaria y con mi abogado, Maximiliano Orsini, logramos levantar eso y que fuera trasladado a un penal. Hoy, cuando nadie es trasladado a un penal, cuando sueltan presos de las cárceles logramos que Sasso fuera llevado a un penal. Lo logramos”, finaliza Verónica Borelli.